Trenes de Línea B operan sin sistema de pilotaje automático: Sindicato del Metro
La problemática, afirma, implica riesgo de que se registre un accidente en el que resulten perjudicados los usuarios, trabajadores, instalaciones y trenes
Crisis del Metro
El Sindicato Nacional de Trabajadores del Metro (SNTM) informó que los trenes de la Línea B circulan sin el sistema de pilotaje automático (P.A.), lo que implica "un riesgo permanente de que se registre un accidente en el que resulten perjudicados los usuarios, trabajadores, instalaciones y trenes", por lo que solicitó al Director General del Sistema de Transporte Colectivo (STC), Guillermo Calderón, que atienda inmediatamente la problemática que afecta a usuarios y trabajadores de la Línea B, desde la estación Ciudad Azteca hasta Villa de Aragón.
Según el sindicato, encabezado por Fernando Espino, el problema se debe a que las tarjetas correspondientes para operar el P.A. están agotadas y que no se cuenta con las refacciones necesarias para reparar las existentes.
El sindicato propuso como solución cambiar el sistema de control y velocidad de los trenes por el Sistema de Control de Velocidad y Seguimiento de los Trenes (CBTC), como se aplica en la Línea 12. Este sistema permite una mejor gestión del tráfico ferroviario, una mayor seguridad y eficiencia, y una reducción del tiempo de espera entre trenes.
El sindicato expresó su preocupación por las condiciones en las que se encuentra la Línea B, que es una extensa zona con 722 metros y 21 estaciones. Asimismo, exigió al STC Metro que cumpla con sus obligaciones laborales y garantice el derecho a un transporte público digno y seguro.
Se harán obras de renivelación
La rehabilitación de un tramo elevado en la Línea B del Metro comenzará el próximo 18 de enero, y a lo largo de un año, se llevará a cabo el proyecto de renivelación. La misión principal es mejorar la velocidad de los trenes en cuatro estaciones claves: San Lázaro, Flores Magón, Romero Rubio y Oceanía, es decir un total de 4.18 kilómetros, buscando pasar de 35 a 65 kilómetros por hora.
Más allá de la mejora en velocidad y seguridad, el proyecto tiene un propósito adicional: restaurar las condiciones originales de la Línea B, remontándose a su estado en 1999. Este enfoque incluye abordar hundimientos diferenciales presentes en el tramo, asegurando una infraestructura sólida y duradera.
Las autoridades aseguran a los usuarios que se implementarán medidas para minimizar cualquier inconveniente durante las obras nocturnas. La garantía es clara: el servicio se mantendrá ininterrumpido, demostrando un compromiso firme con la comodidad y seguridad de los usuarios.