
El juicio penal contra Harvey Weinstein en Manhattan sufrió este jueves un duro revés después de que el juez Curtis Farber del Tribunal Supremo de Nueva York declarara nulo el proceso por una acusación de violación, al no poderse alcanzar un veredicto por la negativa de un jurado a continuar con las deliberaciones.
El caso, que marcaba el rejuicio de Weinstein tras la anulación de su condena de 2020 por parte de una corte de apelaciones el año pasado, enfrentaba al exmagnate de Hollywood, de 73 años, a tres nuevos cargos relacionados con agresiones sexuales. El juicio había comenzado el pasado 23 de abril.
Juicio descompuesto
El veredicto fragmentado dejó un saldo ambiguo: Weinstein fue declarado culpable de agredir sexualmente a Miriam Haley, una exasistente de producción, en 2006. Por ese delito, enfrenta hasta 25 años de prisión. Sin embargo, fue absuelto del cargo de agresión sexual contra la actriz Kaja Sokola, quien lo acusaba de haberla atacado en 2002 cuando tenía apenas 16 años.
El tercer cargo, por violación, se centraba en la denuncia de la actriz aspirante Jessica Mann, quien señaló a Weinstein por un ataque sexual ocurrido en 2013. El jurado, sin embargo, no logró alcanzar una decisión sobre ese caso, y uno de sus integrantes se negó rotundamente a seguir deliberando, lo que llevó al juez Farber a declarar un juicio nulo (mistrial) en ese punto.
Harvey Weinstein, alguna vez considerado uno de los hombres más influyentes del cine estadounidense, enfrenta múltiples condenas, procesos y apelaciones tras la avalancha de acusaciones que dieron origen al movimiento #MeToo en 2017.
En este juicio, el exproductor volvió a proclamarse inocente y negó todas las acusaciones de agresión sexual o cualquier acto no consensuado. La anulación de uno de los cargos más graves supone un nuevo capítulo en una batalla judicial prolongada y plagada de altibajos.
A pesar del fracaso parcial del proceso, Weinstein continúa bajo condena. Además de este nuevo veredicto por la agresión a Haley, el exproductor sigue cumpliendo una sentencia de 16 años en California por otros delitos sexuales. La Fiscalía de Nueva York no ha aclarado aún si buscará reabrir el caso anulado o dejarlo en suspenso.