
El mayor retirado del Ejército de Nicaragua Roberto Samcam, de 66 años, fue asesinado este jueves en San José, Costa Rica, en un aparente ataque dirigido. Samcam, exiliado desde 2018 y férreo crítico del presidente Daniel Ortega, recibió al menos ocho disparos frente a su edificio de apartamentos por parte de hombres que se habrían hecho pasar por repartidores.
“Fue algo que no esperábamos, jamás imaginamos que pudiera pasar”, declaró entre sollozos Samantha Jirón, hija adoptiva del analista político, quien desde el exilio denunciaba sistemáticamente las violaciones a los derechos humanos en Nicaragua. Su esposa, Claudia Vargas, también señaló que el trabajo de Samcam era “exponer los abusos de la dictadura”.
Los agresores aprovecharon que el edificio no contaba con seguridad por la mañana, explicó Randall Zúñiga, jefe de la policía judicial costarricense. Según el reporte oficial, uno de los hombres llamó por su nombre a Samcam y, cuando se acercó, le disparó a quemarropa. Luego huyeron en motocicleta, de acuerdo con el portal nicaragüense Confidencial.
Aunque las autoridades costarricenses aún investigan, diversos sectores del exilio nicaragüense no dudaron en responsabilizar al régimen de Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo. “Roberto era una voz poderosa contra la dictadura”, dijo su esposa a medios locales.
Desde EU, la Oficina para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado condenó el asesinato y ofreció ayuda a Costa Rica para “llevar ante la justicia a los autores materiales e intelectuales”.
Arturo McFields, exembajador de Nicaragua ante la OEA y hoy exiliado en EE.UU., calificó el crimen como “un acto de venganza política cobarde”. La escritora Gioconda Belli lo definió como “una señal gravísima con motivaciones políticas evidentes”.
El régimen de Ortega no ha emitido ningún pronunciamiento. Los medios oficialistas de Nicaragua, por su parte, han optado por silenciar el hecho.
Samcam era una de las figuras más visibles del exilio nicaragüense en Costa Rica. Tras huir de su país en 2018 —tras la brutal represión de las protestas en la que murieron más de 300 personas, según Naciones Unidas— se convirtió en uno de los más constantes analistas sobre la situación política de su país.
En enero de 2023, otro opositor nicaragüense en Costa Rica, Joao Maldonado, sobrevivió a un ataque armado mientras conducía junto a su pareja. Ambos resultaron gravemente heridos.
Desde España, Dora María Téllez, excomandante sandinista y también crítica del régimen, aseguró que el asesinato de Samcam marca “el inicio de una ‘noche de los cuchillos largos’ ordenada por Ortega y Murillo”, en referencia a la purga nazi de 1934. “Ven en él una voz que aún resuena en las filas del Ejército”, afirmó en entrevista con 100% Noticias.
El expresidente costarricense Luis Guillermo Solís condenó el asesinato como un “acto indignante y extremadamente grave” vinculado directamente con la oposición frontal de Samcam al régimen.
Daniel Ortega, de 79 años, regresó al poder en 2007 y, desde entonces, ha instaurado un régimen autoritario. Más de 5 mil organizaciones civiles han sido clausuradas, cientos de opositores encarcelados o despojados de su nacionalidad, y decenas de periodistas forzados al exilio. La mayoría de los medios independientes operan desde el extranjero.
El asesinato de Samcam añade una nueva sombra al historial represivo del gobierno de Ortega y profundiza el temor entre el exilio nicaragüense que, en Costa Rica, supera las 100 mil personas.