
Los líderes de los dos países que más emiten gases de efecto invernadero han escogido caminos radicalmente opuestos. El presidente de China, Xi Jin Ping, se comprometió este miércoles, por primera vez, a reducir los gases de efecto invernadero, mediante una apuesta billonaria por las energías verdes; mientras que su homólogo estadounidense, apuesta por aumentar la quema de energía fósiles, mientras se niega a aceptar la evidencia científica sobre el cambio climático.
En el marco de la cumbre del clima de la ONU, que se celebra en paralelo a la Asamblea General y que saboteó Trump, negando la presencia de EU, Xi anunció este miércoles los nuevos planes nacionales sobre el clima para 2035, entre ellos reducir las emisiones de gases de efecto invernadero entre un 7% a 10% respecto en los próximos diez años. Se trata de la primera vez que el régimen de Pekín asume un compromiso tan fuerte para frenar el calentamiento global, antes de que sea demasiado tarde y la Tierra cruce un punto de no retorno que ponga en peligro a la humanidad.
Además, Xi se comprometió a la instalación de 3.6 gigavatios de capacidad de energía solar y eólica, más de seis veces el nivel de 2020, para que en 2035 el consumo de energía renovable en el país represente más del 30% del consumo total de energía.
A través de un videomensaje en la cumbre del clima, el mandatario también se comprometió en una ampliación del sistema de comercio de emisiones para los sectores con mayores emisiones, así como la “construcción de una sociedad comprometida con el cambio climático”.
“La transición verde y baja en carbono es la tendencia de nuestro tiempo”, declaró el líder chino, quien en poco tiempo ha pasado de no hacer nada contra el cambio climático y de estar a la cola en descarbonización a convertirse en líder de la nueva revolución “a la que algunos países se oponen”, dijo en un aparente reproche a Estados Unidos.
Actualmente, el país asiático se ha comprometido a estabilizar sus emisiones de CO2 para 2030 y a alcanzar la neutralidad de carbono para 2060.
Primera caída de emisiones
En 2024, China, el segundo país más poblado del mundo con 1,400 millones, emitió aproximadamente 12,000 millones de toneladas métricas de gases de efecto invernadero, lo que representa cerca del 30% de las emisiones globales.
Aunque sigue siendo el mayor emisor del mundo, las emisiones han comenzado a disminuir ligeramente, con una caída del 1.6% en el primer trimestre de 2025 gracias al aumento en energía limpia como solar, eólica y nuclear.
“El amanecer de una nueva era”
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, declaró en su discurso de inauguración de la cumbre del clima (previo a la cumbre mundial de Brasil-COP 30, en noviembre) que “estamos en el amanecer de una nueva era energética”.
El portugués recalcó en su discurso que es posible limitar el aumento de la temperatura global a 1.5 grados para finales de siglo y subrayó que en los últimos diez años el aumento de la temperatura global previsto ha bajado de 4 grados a 2.6.
EU, más aislado que nunca
La presencia de otras potencias contaminantes en la cumbre, como Rusia, Japón y Alemania, hizo más evidente el aislamiento de Estados Unidos, el segundo país más contaminante del mundo, con 5,100 millones de toneladas métricas en 2024 (12.5% del total mundial), aunque con diferencia el país con más emisiones per cápita, con 15 toneladas, frente a las 8.9 toneladas per cápita de China.
Durante su discurso en la Asamblea General, el presidente Trump dejó en evidencia su ignorancia, su negacionismo y su mala educación llamando “personas estúpidas” a los expertos que llevan años demostrando con evidencia científica el cambio climático.
“Todas esas predicciones hechas por la ONU y muchos otros, a menudo por razones equivocadas, fueron erróneas. Las hicieron personas estúpidas”, y a continuación calificó de “estafa climática” el calentamiento del planeta.
Discurso de Trump “abominable”
El gobernador de California, el demócrata Gavin Newsom, calificó este miércoles de “abominación” el discurso del republicano ante la tribuna de la ONU.
Newsom tildó de “vergonzosa” la afirmación de Trump de que el consenso científico sobre el calentamiento global fue creado por “gente estúpida”.
“California es un socio estable y confiable en la crisis climática y la protección de nuestro medio ambiente”, resaltó el gobernador.
La secretaria de la Agencia de Protección Ambiental de California (CalEPA), Yana García, dijo que el estado ha sido un experimento “exitoso” de cómo se pueden tener regulaciones para detener el impacto del cambio climático y ser una economía que se ha posicionado como la cuarta a nivel mundial.
“Específicamente, hemos visto que entre el 2002 y el 2022 la contaminación por gases invernadero cayó un 20%, mientras que nuestro PIB creció un 78% en ese mismo periodo, lo que demuestra que hay una relación entre reducir las emisiones y una buena economía, algo contrario a lo que dice el presidente Trump”, indicó la funcionaria.