Mundo

Dimite el jefe de la Inteligencia militar israelí por fiasco tras el ataque de Hamás

“Llevo ese día negro (7-O) para siempre”. El líder de la oposición, Yair Lapid, pide a Netanyahu que siga su ejemplo

guerra en oriente medio

Imagen de archivo del general Aharón Haliva (d) junto al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu

Imagen de archivo del general Aharón Haliva (d) junto al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu

DPA

El jefe de la Dirección de Inteligencia, Aharon Haliva, solicitó este lunes poner fin a su cargo, al considerarse responsable de la inacción militar que no evitó el ataque múltiple de Hamás del pasado 7 de octubre en el que murieron 1,200 personas en territorio israelí y otras casi 200 fueron secuestradas (133 rehenes siguen aún en poder de los terroristas, casi siete meses después).

"En una decisión con el jefe del Estado Mayor y con la aprobación del ministro de Defensa, se decidió que el general Aharon Haliva terminará su cargo y se retirará de las Fuerzas de Defensa de Israel, una vez que su sucesor sea designado", anunció un comunicado castrense.

Primer alto cargo en dimitir

Haliva se convierte así en el primer alto cargo en dimitir por los fracasos que rodearon el ataque de Hamás, a raíz de lo que el Ejército inició una investigación interna a finales de febrero, cuyas conclusiones se espera que sean presentadas al Jefe del Estado Mayor, Herzi Halevi, a principios de junio.

"Hamás llevó a cabo un ataque sorpresa asesino contra el Estado de Israel, cuyas consecuencias son difíciles y dolorosas. La división de inteligencia bajo mi mando no estuvo a la altura de la tarea que se nos había confiado. Llevo ese día negro conmigo desde entonces, día tras día, noche tras noche. Llevaré el dolor conmigo para siempre", dijo Haliva en hebreo en su carta de renuncia.

Ya en octubre, Haliva, con 38 años de servicio en las Fuerzas de Defensa de Israel, asumió parte de la culpa, ante una respuesta lenta contra miles de milicianos de Hamás, que ese día tomaron el control de más de una decena de comunidades israelíes y llegaron a desplegarse armados en un 3% del territorio.

La investigación interna en curso busca analizar la respuesta de las tropas también en el periodo anterior y posterior al ataque, así como su despliegue en el terreno y los procedimientos operativos usados para anular a los combatientes.

¿Y Netanyahu, cuándo?

Según una encuesta publicada este lunes y realizada entre los días 14 y 17 de abril por el Instituto para la Democracia de Israel, el 62% de la población israelí —tanto judíos como árabes— considera que es hora de que dimitan los responsables de los fallos del 7 de octubre, más de seis meses después de la masacre.

Tras hacerse pública la renuncia del jefe de Inteligencia Militar, el líder de la oposición israelí, Yair Lapid, pidió este lunes al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que siga el ejemplo como máximo responsable del mayor ataque de la historia del Estado judío.

"La autoridad conlleva una gran responsabilidad", escribió Lapid en su cuenta de X, luego de calificar de "honorable" la decisión de Haliva de poner fin a su cargo castrense, al considerarse responsable de la inacción militar que no evitó la matanza.

"Habría sido apropiado que el Primer Ministro Netanyahu hubiera hecho lo mismo", agregó Lapid.

En términos similares se expresó también hoy Vladimir Beliak, otro diputado del partido de Lapid, Yesh Atid, pidiendo la dimisión "inmediata" del mandatario israelí, con independencia de si finalmente se establece o no una comisión estatal de investigación para señalar a los responsables de la gestión de la tragedia del 7 de octubre.

La investigación del Ejército, que inició en febrero de manera interna y presentará en junio sus conclusiones, es la única en curso, tras la resistencia de Netanyahu a ser investigado él mismo, pese al clamor popular para que dimita, no sólo por el fiasco del 7-O que no vio venir, sino por los procesos judiciales en su contra por corrupción y por tratar de cambiar las leyes para librarse de la cárcel.