Apicultor real informa a las abejas de Buckingham de la muerte de Isabel II
“La Señora ha muerto, pero no te vayas. Tu nuevo señor será un buen amo para ti”, recitó en voz baja el apicultor real de este centenario ritual
gran bretaña
Colmenas reales con el lazo negro
Las abejas reales de Gran Bretaña fueron informadas este lunes del fallecimiento de Isabel II y de que tienen un nuevo amo: Carlos III.
Bajo el marco de una tradición que se remonta siglos atrás, el apicultor real, John Chapple, acudió a las colmenas de la zona del Palacio de Buckingham y Clarence House —la residencia del nuevo monarca hasta el fallecimiento de la reina, el pasado 8 de septiembre— para comunicar a los insectos en voz baja que Carlos III es ahora el nuevo rey.
El apicultor real, John Chapple, junto a una ayudante en el bosque que se encuentra en la parte trasera del palacio de Buckingham
“La Señora ha muerto, pero no te vayas. Tu nuevo señor será un buen amo para ti”, repiten el apicultor real y sus ayudantes en cada colmena, a la que golpearon primero suavemente para llamar la atención de las abejas. Luego las envuelven con un lazo negro en señal de luto.
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El extraño ritual está basado en una vieja superstición que dice que en caso de no avisar a las abejas de un cambio de dueño, provocaría que estas no produjesen miel, abandonasen la colmena e incluso que murieran.
Al cuidado de un millón de abejas
“En Clarence House tenemos dos colmenas y en Buckingham tenemos cinco”, comentó Chapple.
“No soy muy bueno contando —admitió el apicultor real al Daily Mail—, pero en esta época del año suele haber unas 20 mil abejas en cada colmena, quizá un poco más. En pleno verano pueden llegar a un millón de abejas entre todas las colmenas”.
Chapple reveló que lleva 15 años como apicultor real, aunque confiesa que nunca fue nombrado oficialmente.
“Un día recibí un correo electrónico del jardinero jefe aquí en el Palacio de Buckingham para venir aquí y hablar sobre las abejas. Pensé que tenían un problema con las abejas, pero resultó que querían tener abejas, así que de ahora en adelante cuido de las abejas", declaró, sin saber si Carlos III requerirá de sus servicios o engrosará la lista del centenar largo de empleados que han recibido la carta de despido en los once días que lleva de rey.
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