Mundo

Israel ordena la evacuación de 100 mil palestinos para comenzar invasión de Rafah

Netanyahu desoye el clamor para que no entre en la única ciudad de la Franja que no ha sufrido una invasión terrestre y donde se hacinan 1.5 millones de hacinados, de ellos 600 mil niños

guerra en oriente medio

Una palastina y sus hijos huyen a pie de la zona este de Rafah que va a ser invadida por las tropas israelíes

Una palastina y sus hijos huyen a pie de la zona este de Rafah que va a ser invadida por las tropas israelíes

EFE

Los gazatíes se enfrentan desde este lunes a una nueva catástrofe humanitaria, tras la decisión del gobierno de Benjamín Netanyahu de comenzar la invasión de Rafah, último bastión que Israel no ha sido destruido en su totalidad en estos siete meses de guerra y donde se han refugiado 1.5 millones de palestinos (más de la mitad de los habitantes de la Franja) que han perdido todo.

“Cualquiera que esté cerca de las organizaciones terroristas pone en peligro su vida y la de su familia”, reza uno de los panfletos distribuidos entre la población. “Por su seguridad, el ejército le pide que evacue inmediatamente”, alerta otro donde enmarcan las zonas del este de Rafah que deben evacuar (y donde viven 100 mil personas) y señalan la zona donde deben refugiarse, cerca de la playa, donde supuestamente tendrá comida y medicinas.

El lanzamiento de panfletos coincide con el fracaso del último intento de negociar un alto el fuego con Hamás y con los primeros bombardeos sobre zonas pobladas de Rafah, cerca de la frontera con Egipto.

“Se avecina una catástrofe”

Los preparativos para la invasión de este territorio, la única urbe de la Franja en la que el ejército israelí aún no ha entrado con tropas terrestres, se desarrollan, además, en contra de las advertencias de la comunidad internacional.

A la cabeza de esos llamados se sitúan su principal aliado, Estados Unidos, la ONU y las organizaciones humanitarias que no se cansan de advertir que se avecina una “catástrofe humanitaria” en una población traumatizada por siete meses de bombardeos, hambruna, destrucción de su patrimonio y de sus hospitales, y duelo por la muerte de 34 mil personas, la mitad de ellas menores de edad.

El acuerdo de alto el fuego se ha estado acariciando en los últimos días, pero fue finalmente el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, el que llevó al traste el proceso, según The New York Times, que señala que sus declaraciones a lo largo del fin de semana al insistir en invadir Rafah llevaron a Hamás a endurecer su postura.

"No nos quedó otra opción"

Para culminar la escalada de la tensión, el grupo terrorista atacó el domingo territorio israelí fronterizo, matando al menos a cuatro soldados, horas antes de que las negociaciones se dieran por finalizadas. En medio de esta coyuntura, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, ha dicho que “no queda otra opción” más que poner en marcha esa operación en Rafah, y así se lo comunicó en una llamada de teléfono al secretario de Defensa de EU, Lloyd Austin. 

Pero el sufrimiento que conlleva la invasión de Rafah (en el marco de una creciente protesta internacional contra la agresión israelí, como se ve en los campus universitarios) está subiendo el tono de las críticas.

Llamada de Biden

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hablará este lunes por teléfono con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, en un intento de frenar la invasión o de que sea lo más controlada posible.

Esa fuente no concretó a qué hora se producirá esa conversación, que llega el mismo día en que a las 13.00 hora local Biden tiene prevista una reunión a puerta cerrada en la Casa Blanca con el rey Abdalá II de Jordania en formato de almuerzo, según la agenda oficial.

“Una ofensiva israelí en Rafah significaría más sufrimiento y muertes de civiles. Las consecuencias serían devastadoras”, advirtió la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos (UNRWA), que ha querido dejar claro que no está participando en ese orden de evacuación ordenada por Israel. “La agencia mantendrá una presencia en Rafah el mayor tiempo posible y continuará proporcionando ayuda vital a las personas”, añadió a través de la red social X.

Mientras tanto, Hamás lanzó la siguiente advertencia: “La ofensiva en Rafah no será un picnic”.