Marruecos y Francia acordaron este jueves acelerar la cooperación industrial en sectores como la automoción, la aeronáutica y el transporte ferroviario, para reforzar sus intercambios en un momento de regionalización de las cadenas de valor.

Son algunas de las ideas abordadas en una reunión en Rabat entre el ministro de Industria marroquí, Anas Mezzour, y el ministro delegado de Comercio Exterior francés, Franck Riester, que visita Marruecos en un contexto en el que ambos países están sellando su reciente acercamiento bilateral tras un enfriamiento diplomático en los últimos años.

"Es un momento particular de relanzamiento y reconfiguración de nuestra asociación con Marruecos. Hay muchos proyectos a realizar en común en industria y energías renovables (...) para afrontar retos en materia de descarbonización de nuestras economías y transición energética y del sector digital", dijo Riester en declaraciones a la prensa.

Por su parte, el ministro marroquí indicó que tratará con su homólogo facilitar el acceso de los productos de ambos países a los mercados europeos, africanos y mundiales "en un mundo que entra en el proteccionismo tras la era de la globalización".

"Es un encuentro que sirve para intercambiar experiencias con el fin de encontrar soluciones para países que tienen relaciones comerciales profundas", dijo Mezzour, que añadió que Francia es el segundo socio comercial de Marruecos (después de España) y calificó los intercambios comerciales de "equilibrados" con un excedente a favor del país magrebí.

Los intercambios comerciales entre ambos países se situaron en 121.000 millones de dirhams (1.109 millones de euros) en los primeros nueve meses de 2023, frente a 115.000 millones de dirhams (10.500 millones de euros) en el mismo período el año anterior.

Mientras, las inversiones francesas en Marruecos fueron de 745 millones de euros en esos nueve meses, un 31 % menos que en el mismo periodo de 2023, lo que supone un 34 % del total de inversiones extranjeras directas que recibe el país magrebí.

Las relaciones entre Marruecos y Francia -antigua potencia colonial del país- afrontaron en los últimos años un enfriamiento debido a un cúmulo de factores, entre ellos el acercamiento entre París y Argel -rival regional de Rabat- y el deseo de Marruecos de que Francia se posicione más claramente a favor del plan de autonomía propuesto por Rabat como solución para el conflicto del Sáhara Occidental.

La reconciliación quedó escenificada en una visita a Rabat el pasado febrero del nuevo ministro de Exteriores francés, Stéphane Séjourné, en la que anunció la apertura de un nuevo capítulo en las relaciones bilaterales.

Al menos cinco ministros franceses viajarán en diferentes fechas a Marruecos, comenzando por Riester, a quien seguirá el ministro francés de Agricultura, Marc Fesneau; el de Interior, Gérald Darmanin, y la de Cultura, Rachida Dati.