En Guerrero 177 mil 804 estudiantes de educación básica fueron afectados y 190 escuelas dañadas por Otis en su infraestructura y suministro de servicios, informaron organizaciones civiles y la Secretaría de Educación estatal (SEG).

Además, más de 296 mil niños y adolescentes podrían haberse visto seriamente afectados, mismos que presentarán efectos a corto plazo desde mala nutrición, contagio de enfermedades, daño nutrimental, físico y psicológico.

Los centros educativos se encuentran sin posibilidad de operar, informó este domingo el secretario de Educación del gobierno de Guerrero, Marcial Rodríguez Saldaña.

“En cuanto haya condiciones reanudaremos clases presenciales o virtuales, e iniciaremos la etapa de reconstrucción de escuelas”, explicó.

Añadió que el Instituto Guerrerense de Infraestructura Educativa (IGIFE) ha logrado visitar 86 centros educativos para determinar su afectación y necesidades inmediatas sin que a la fecha se determine cuando reanudarán clases.

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El funcionario expresó que la SEG realizará jornadas de limpieza en todas las escuelas con la participación de servidores públicos educativos, maestros, estudiantes, y Padres de Familia.

Rodríguez Saldaña dijo que los primeros días de esta primer semana de noviembre se realizarán reuniones en Acapulco y Coyuca de Benítez, con supervisores de los distintos niveles educativos, para continuar la revisión de los daños en las escuelas.

La SEG elaboró un plan integral para la reconstrucción y reactivación del sector educativo dañado, que busca recolectar víveres, censar daños, introducir servicios de acceso a luz y agua, y limpiar las instituciones educativas.

177 mil alumnos afectados

Por su parte, las organizaciones UNICEF y Save The Children calcularon al menos 177 mil 804 estudiantes de educación básica resultaron afectados tras el cierre de escuelas en los cinco municipios mayormente dañados por Otis.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de los Hogares del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), Guerrero ocupa el cuarto lugar en el país en rezago educativo en población de 15 años y más, por debajo de Oaxaca, Chiapas y Michoacán.

Le corresponde una matrícula total de 1,008,226 estudiantes, de los cuales 508,229 (50.4%) son mujeres y 499,997 (49.6%) son hombres.

En Acapulco, el municipio con mayores daños esacolares y educativos, hay casi 200 mil niños y jóvenes en edad escolar; y 33 mil niños entre cero y dos años, señalaron.

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia informó que, en situaciones similares a las causadas por Otis, los niños y adolescentes pueden enfrentar carencias de alimentación, acceso limitado al agua potable, riesgo de enfermedades.

También pueden padecer abusos a su integridad física y emocional, debido al aumento de la violencia y el crimen en las comunidades afectadas.

A ello hay que sumar el duelo que vivirán los menores que perdieron a algún familiar por el embate del meteoro, alerto la UNICEF.