
La discusión sobre el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (FOBAPROA) “encendió los ánimos” en la primera sesión de la Comisión Permanente donde Morena y la oposición se enfrascaron en un ríspido debate donde se acusaron mutuamente de endeudar al país y de paso incluyó apagar el micrófono a legisladores de oposición por parte del presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña.
La diputada Dolores Padierna, fue la primera en abrir fuego y llamó a revisar a fondo el Fobaproa y exigió responsabilidades a quienes, según ella, permitieron un presunto saqueo a la nación.
“Hagamos una verdadera auditoria, porque la auditoria que se practicó en aquellos tiempos fue, insisto, una verdadera simulación”, demandó.
La legisladora recalcó que se debe revisar el Fondo Bancario y obligar a que devuelvan lo robado y con eso liquidar gran parte de la deuda bancaria, “para que no la siga pagando el pueblo.
Acusó directamente al expresidente Ernesto Zedillo, así como a los partidos PRI y PAN, de haber aprobado un rescate bancario lleno de corrupción, malas prácticas y autoritarismo.
“Deben rendir cuentas, deben regresar al pueblo lo robado, deben tener tantita responsabilidad o al menos pedir perdón a México”, sostuvo.
El coordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Humberto Moreira intentó intervenir y acusó a Morena de usar a Ernesto Zedillo y al FOBAPROA como distractores de otros temas que afectan seriamente al gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, como el caso Teuchitlán y el rancho Izaguirre.
Pero su intervención fue interrumpida de inmediato por Fernández Noroña, presidente de la Comisión Permanente, quien acusó al priista de introducir “la agenda política por la puerta trasera” y ordenó cortar el audio de su micrófono.
Ello detonó la molestia de la oposición y Moreira calificó de “fascista” a Fernández Noroña.
El coordinador de los diputados del PRI, Rubén Moreira exigió a Fernández Noroña no aplicar un reglamento que no fue aprobado por ambas cámaras del congreso y reclamó una agenda política a modo del oficialismo para distraer la atención de los graves problemas del país y aplicar un reglamento que no fue avalado por la Cámara de Diputados.
Incluso, Leonel Godoy, diputado de Morena recordó a Fernández Noroña que el nuevo “reglamentillo” como se le conoce no fue avalado por diputados y por lo mismo estaba vigente el anterior.
Senadores de oposición, reclamaron que Morena y sus aliados impusieran reglas que no fueron aprobadas por ambas cámaras para regular los debates del congreso durante el receso, pero además que se establecieran, temas a contentillo y no se aborden otros de gran relevancia nacional como el caso Teuchitlán o la relación con Estados Unidos.