
Las universidades mexicanas enfrentan el riesgo de quedar obsoletas si no aceleran su adaptación a los cambios del conocimiento y la tecnología, señaló Ricardo Villanueva Lomelí, subsecretario de Educación Superior de la Secretaría de Educación Pública (SEP), durante el Encuentro Nacional de Rectores Universia México.
Villanueva alertó que lo que hoy se enseña en las universidades pierde vigencia en menos de una década, lo que obliga a replantear los modelos educativos para responder a las necesidades reales de las nuevas generaciones.
El funcionario subrayó que sólo 35 de cada 100 jóvenes que ingresan al bachillerato obtienen un título universitario, por lo que las instituciones deben ofrecer carreras más atractivas y con mayores oportunidades de desarrollo futuro.
De igual manera, hizo un llamado a las universidades públicas para dejar de esperar pasivamente a los estudiantes y asumir un rol más activo en guiarlos hacia áreas con mayor proyección, como las ciencias exactas y las nuevas tecnologías, las cuales, dijo, no han tenido un crecimiento significativo en la última década.
“Las universidades tenemos que promover las ofertas educativas innovadoras y no seguir esperando de manera pasiva a que nos lleguen los jóvenes de prepa, porque si seguimos en ese camino, van a seguir llegando quienes quieran estudiar derecho”, mencionó.
Por su parte, el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí, citó datos del Foro Económico Mundial, al apuntar que para el año 2030 se crearán 170 millones de nuevos empleos, pero desaparecerán 92 millones, producto de transformaciones en tecnología, demografía y sostenibilidad. Subrayó que en México estas tendencias se complican por desigualdades estructurales y limitaciones presupuestales.
Ambos funcionarios coincidieron en que no basta con formar profesionales técnicamente capacitados, sino ciudadanos críticos, éticos y capaces de transformar su entorno ante los retos del futuro.