
Paolo Quadrini, director general de la Asociación Nacional de Fabricantes de Chocolates, Dulces y Similares (ASCHOCO), advirtió que las exportaciones del chocolate mexicano han ido en aumento en los últimos años, sin embargo, resaltó que el punto preocupante es que la concentración de dichas ventas al exterior, ya que tan sólo en el 2021, Estados Unidos concentró el 97.8 % del valor exportado de chocolate y derivados del cacao mexicanos, por un monto de 750.8 millones de dólares.
Al respecto, puntualizó que pese a que el crecimiento ha sido sostenido desde 2007, esa alta dependencia de un solo destino representa una vulnerabilidad para el sector exportador, por lo que uno de los principales retos de la actualidad es seguir diversificando los destinos de exportación a países como Nicaragua, Canadá, Guatemala, entre otros.
Además de la citada diversificación, ASCHOCO promueve activamente una agenda basada en: innovación en el campo, con modelos de agroforestería, más eficientes y sostenibles que permiten la trazabilidad digital, formación de nuevas generaciones de productores, con enfoque técnico y empresarial.
Asimismo, se impulsa una promoción activa del consumo nacional, a través de experiencias personalizadas como catas, alianzas con chefs y desarrollo de productos gourmet y premium como los chocolates elaborados con chiles, mezcales o chapulines.
Aunado a lo anterior, se ha venido dando la integración de cacao en bebidas artesanales o añejadas como el mismo mezcal o whiskey, revalorización nutricional del chocolate como una fuente rica de antioxidantes, hierro, magnesio al que se le atribuyen beneficios para la salud cardiovascular, el estado de ánimo y la función cerebral siempre en su forma más pura y consumo moderado.
Derrama económica del chocolate supera los 50 mmdp
En este contexto, resaltó que el chocolate cuenta con una derrama económica superior a los 50 mil millones de pesos anuales, genera más de 60 mil empleos directos y 200 mil empleos indirectos, en beneficio de más de 45 mil familias productoras, con lo que esta industria se consolida como una actividad estratégica para el país.
Además, más del 65 % de los insumos utilizados en esta industria del cacao y el chocolate son de origen nacional, lo que refuerza su papel clave en la dinamización de economías regionales, la creación de empleo en comunidades rurales y la preservación de la identidad cultural del país.
A su vez, María Bertha Becerra, vocera del Consejo Regulador del Tequila, destacó que en 2024, la industria produjo 496 millones de litros de tequila y se exportaron 400 millones, y en lo que va del 2025 se han producido 255.8 millones de litros y exportado 173 millones de litros y a la fecha existen 3,144 marcas de tequila las vinculadas a un productor autorizado; 209 los productores de tequila y 43,400 productores de agave.
Catas de chocolate con tequila
Con el objetivo de seguir innovando, dijo, el sector está cerrando filas con diversos socios e industrias para seguir incentivando el consumo del cacao y del tequila, por ejemplo, mencionó, a través del Consejo Regulador del Tequila, se están desarrollando catas de chocolate con tequila, a fin de impulsar una nueva cultura del chocolate de calidad, acercarlo a nuevas generaciones de consumidores y generar mayor valor agregado a los productos nacionales tanto dentro como fuera del país.
Industria del tequila, consolidarse como agroindustria sustentable
Por su parte, el Consejo Regulador del Tequila, busca dejarles grandes aportes del tequila a los mexicanos y a las nuevas generaciones buscando consolidarse como emblema mundial de las agroindustrias sustentables, a través de metas establecidas para el 2030, entre las que se encuentran:
Disminuir 25% de la huella de carbono directa, aumentar 12% el consumo energía de origen renovable, aumentar el 5% del consumo de energía eléctrica renovable (por unidad de producción), disminuir el 15% el consumo de agua, aumentar el 80% de consumo de agua tratada.
Con políticas públicas integrales, innovación y colaboración entre sectores, el cacao y el tequila mexicano tienen el potencial de consolidarse no solo como un orgullo nacional, sino en un motor sostenible de desarrollo.