
En junio, la aprobación ciudadana de los mandatarios estatales mostró señales mixtas: aunque 20 gobernadores lograron mejorar su evaluación, el promedio nacional apenas alcanzó el 48.5%, cifra que se mantiene por debajo del 50% por sexto mes consecutivo.
El informe mensual elaborado por Mitofsky indica que los cambios más notorios ocurrieron en Morelos, donde la gobernadora Margarita González Saravia escaló once lugares en el ranking, pasando del lugar 26 al 15. También destacan los avances de Tere Jiménez (Aguascalientes), quien subió 2.4 puntos porcentuales, y de Pablo Lemus (Jalisco), con un alza de 1.6 puntos.
Por el contrario, algunos mandatarios sufrieron retrocesos considerables. Esteban Villegas, de Durango, cayó siete posiciones; Alfredo Ramírez Bedolla, de Michoacán, bajó seis; y Víctor Castro, de Baja California Sur, descendió cinco lugares respecto a la medición de mayo.
El ranking también muestra que los gobernadores de oposición continúan con una aprobación promedio más alta que los del partido oficial, aunque las diferencias no son amplias.
En la parte alta de la lista, sobresale Quintana Roo, con Mara Lezama como la mandataria mejor evaluada del país, seguida por la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, y el gobernador de San Luis Potosí, Ricardo Gallardo.
En contraste, Zacatecas se ubicó al final del ranking, con David Monreal como el mandatario con menor aprobación, relegando a otros gobernadores que habían ocupado las últimas posiciones en meses anteriores.
Los datos reflejan una ciudadanía atenta al desempeño local y un escenario político en constante ajuste, donde los avances o retrocesos en la percepción pública pueden ser marcados en apenas unas semanas.