
La acuacultura no sólo representa una fuente de alimentos con alto valor nutricional, también es una herramienta estratégica para generar empleo y reducir la presión sobre los ecosistemas marinos. Así lo destacó Víctor Manuel Vidal Martínez, titular del Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables (IMIPAS), al presentar el libro Diagnóstico de la Acuacultura Rural en México (2022–2024), resultado de una investigación realizada en 146 municipios de 20 entidades del país.
Durante la presentación, Vidal Martínez subrayó que esta herramienta permitirá canalizar esfuerzos y recursos hacia las zonas de mayor necesidad, con un enfoque territorial, incluyente y sustentable.
El estudio recopila experiencias de comunidades pesqueras y unidades de producción acuícola, así como los desafíos técnicos y sociales que enfrentan. También propone rutas de acción para profesionalizar a los acuacultores, brindar acompañamiento técnico y promover buenas prácticas. Se enfocó en en los municipios más marginados y las consideradas zonas de mayor necesidad.
Norma López Téllez, autora de la publicación e investigadora del IMIPAS, explicó que el diagnóstico revela una necesidad urgente de apoyo en capacitación y acceso a tecnologías adecuadas. “No se trata solo darles las herramientas, sino acompañarlos para que ellos vean la importancia que es mantener y tener las buenas prácticas de manejo a lo largo de su cultivo [...]. Todo esto es para producir más y mejor para el autoconsumo o la venta”, afirmó.
El libro, disponible para descarga gratuita en https://bit.ly/4kMHQy3, y se espera qye sirva como base para orientar la política pública en la materia y reforzar la resiliencia de las comunidades rurales ante el cambio climático.