El martes 19 de octubre de 2021, durante una hora, vecinos de San Pablo Xalpa en el municipio de Tlanepantla de Baz, permanecieron atentos a Facebook y otras redes para recibir y enviar información de una balacera que ocurría a unos metros de sus hogares.

Los vecinos están usando las redes para cuidarse. Hace un año, los que viven en algunas zonas específicas de la colonia eran constantemente asaltados por un par de tipos en una moto blanca y decidieron crear un grupo de WhatsApp para dar la alerta inmediata ante una nueva incursión de estos maleantes. El uso de la red dio resultado: luego de varios intentos fallidos de capturar a los maleantes, por fin los vecinos les cayeron encima luego de uno de sus robos; los golpearon y los entregaron a la policía.

Este martes, la monotonía de publicaciones sobre comida rápida y venta de diversos productos se interrumpió a las 10 de la noche. Una serie de detonaciones rompió la noche a la hora citada y provocó una estampida de vecinos hacia sus teléfonos: En las redes comenzó una ola de preguntas “¿Qué pasó? ¿En dónde fue? ¿Alguien sabe algo?”.

Los vecinos trataron de dilucidar el lugar donde ocurrieron los disparos. Algunos aseguraban que fue frente a una tienda de abarrotes, otros más alegaban que debía ser cerca de un parque o en la zona cercana a una fábrica de cartón, una de las zonas más peligrosas. Hay quien dijo que debió ser en la unidad “de los tepiteños”, un multifamiliar que verdaderamente fue poblado con familias trasladadas desde el barrio Bravo.

La primera respuesta con datos: “Mataron a 2 en las jardineras que están frente a la Conasupo”. Un segundo vecino comenzó a alertar al resto de los miembros del grupo y señaló que habían asesinado a dos hombres de la unidad denominada Azules, y se encontraban tirados enfrente de la tienda de la zona.

Los habitantes de San Pablo Xalpa se tratan de proteger con información en las redes: las disputas por la venta callejera de drogas han provocado que aparezcan de vez en vez cadáveres abandonados en las calles. Este martes los disparos, se confirmó, provocaron muerte.

“Ya estoy cansada de esto, de no poder estar tranquila, vivimos con miedo de salir a la tienda y que en pleno camino nos toque algo como lo de hoy”, es lo último que escribió una vecina en el chat. Nadie responde, aunque se adivina un consenso silencioso.