Asma, enfermedad incurable, que sí se puede controlar
El asma es una de las enfermedades crónicas más comunes en el mundo, caracterizada por la dificultad para respirar, falta de aire, tos, sibilancias y opresión en el pecho
Un diagnóstico temprano, oportuno con fármacos que permitan el control del asma, permite a estos pacientes una calidad de vida prácticamente normal
Cuando las personas abandonan los tratamientos o no acuden a sus revisiones periódicas con el médico, su situación frente al asma se puede complicar, trayendo consigo lo que conocemos como "asma no controlada”, advirtió el doctor Marco Polo, Gerente Médico del Área de Respiratorio de la farmacéutica GSK México.
Precisó que el asma no controlada puede llevar a que el paciente requiera el uso de un mayor número de medicamentos, así como dosis aumentadas, ante un riesgo incrementado de sufrir exacerbaciones graves y mayor obstrucción de las vías aéreas.
Subrayó que el seguimiento médico continuo, es fundamental para que el paciente pueda lograr un adecuado control de la enfermedad.
El especialista recordó que el tratamiento del asma debe entenderse de manera integral y acompañarse de cambios en los estilos de vida, así como autoconocimiento y adherencia al tratamiento.
Es importante recordar que el asma, en nuestro país afecta entre el 7 y 8% de la población a nivel nacional, y puede presentar diversos niveles de gravedad, y aunque se trata de una enfermedad incurable, en la actualidad existen tratamientos para cada tipo –entre los cuales se encuentran, medicamentos de terapia biológica, la cual consiste en los llamados anticuerpos monoclonales, dirigidos específicamente a pacientes asmáticos graves-, que tienen como fin evitar las exacerbaciones y lograr un mayor control de la enfermedad.
En temporada invernal, los pacientes con asma deben extremar precauciones para evitar enfermedades virales y presentar crisis respiratorias
El doctor Marco Polo señaló que cuando el paciente es diagnosticado con asma, es de suma importancia que comience a conocer su enfermedad, y vaya identificando cuáles son los desencadenantes de sus eventos de asma, qué la puede agravar, así como la importancia del apego al tratamiento.
Al respecto, indicó que algunos aspectos que pueden ocasionar crisis de asma se encuentran los factores ambientales, ahora que se han comenzado a registrar algunos días nublados y con bajas temperaturas, así como el polen, la caspa de animales como gatos o perros, ácaros de polvo o algunos contaminantes, así como la exposición al humo de tabaco, o humo de leña, solventes, algunos alimentos e incluso ciertos medicamentos, y una vez identificado el alérgeno, se elaboran y prescriben tratamientos específicos.
Además de los fármacos, resaltó, un buen control del asma incluye un estilo de vida saludable que ayude a mejorar la capacidad cardiopulmonar, de acuerdo con un plan hecho por el médico tratante, un plan que deberá ser individualizado, que permita a las personas que viven con asma llevar un control de su enfermedad de acuerdo a sus necesidades.
Con una visión integral como esta, sostuvo, hay un mejor control de la enfermedad, al identificar y evitar los agentes que desencadenan las exacerbaciones que podrían llegar a la hospitalización, estilo de vida saludable, y apego al tratamiento, porque el paciente con asma, debe recordar que vive con una condición que es incurable, pero que bien cuidado y tomando los medicamentos en la forma prescrita, la enfermedad está controlada.