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Dieciocho días del impacto de Otis, Acapulco está sumida entre montañas de basura

Habitantes de Cacahuatepec, uno de los pueblos rurales, aseguran que las despensas que reparte el gobierno a damnificados “no alcanzan”

Desastre en acapulco

Cuartoscuro

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Han transcurrido 18 días desde que el huracán Otis azotó Acapulco y municipios aledaños en categoría 5, y a los problemas de la insuficiente ayuda para los damnificados se suman otros problemas como falta de agua, electricidad y un asunto que no se ha resuelto hasta ahora que es la acumulación de basura que a lo largo de la costera Miguel Alemán y en calles de colonias del puerto son fácilmente perceptibles por ser ya unas montañas de desechos.

De acuerdo con la agencia Reuters, habitantes de Acapulco, aturdidos por un huracán devastador, luchan ahora contra otra plaga que deja tras de sí la tormenta: la basura acumulada en las calles, que aviva la preocupación por la propagación de enfermedades.

El Gobierno Federal ha enviado a miles de elementos del Ejército Mexicano para ayudar en las labores de limpieza de Acapulco, pero los residentes aseguran que la basura ha invadido algunas zonas tan rápidamente que incluso el tráfico vehicular se ha visto obstaculizado.

A expertos en la propagación de enfermedades les preocupa que puedan empezar a aparecer enfermedades transmitidas por mosquitos, como el dengue, si la ciudad permite que los residuos dañen el drenaje y contaminen el suministro de agua.

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Ayuda insuficiente

Por otra parte, habitantes de Cacahuatepec, uno de los pueblos comunales de la zona rural de Acapulco, aseguran que las despensas que reparte el gobierno a damnificados “no alcanzan”.

Virginia García, habitante de la localidad de más de 600 habitantes, agradeció la ayuda que ha podido llegar a esta zona, pese a lo complicado que es el acceso, ya que han tenido que acceder por aire para entregar los víveres.

Sin embargo, reconoció que los problemas han comenzado porque para el reparto de las despensas existe un Comité que “no se quiere quedar sin nada” y por ello hay familias a las que no se les reparte la ayuda porque no alcanza.

“Me gustaría que los mismos marinos nos las repartieran (las despensas) porque después ya no las quieren repartir o se hace un conflicto entre las mismas familias aquí porque no alcanzan todos”, aseveró.