En el sonido comenzaron a sonar las notas de "México en la piel", cuando triunfante y sonriente, ingresó Claudia Sheinbaum Pardo, a la Arena Ciudad de México, al norte de la Ciudad capital.
Con una capacidad de 22,300 almas, trabajadoras y trabajadores de todo el país, se dieron cita muchos de ellos desde las ocho de la mañana para escuchar a la Coordinadora Nacional de los comités de defensa de la Cuarta Transformación.
La gritería imperaba y con ella el desorden, de todos los estados de la República Mexicana se querían hacer presentes, desde Tijuana hasta Yucatán, de norte a sur y de este a oeste, ellas y ellos, hombres, mujeres, algunos hasta con sus hijos, asistieron para verla y escucharla.
Sheinbaum Pardo avanzó a paso muy lento, sonreía, estrechando manos a diestra y siniestra, saludando a la gente del celular...
Cuatro veces tocaron la canción que Sol de México hizo famosa y que hace estremecer la piel, en total 20 minutos desde la entrada -arribó al recinto poco después de las 12:15 horas-, al estrado -12:40-, para que la aspirante morenista pudiera llegar al estrado y dar su mensaje a la familia del Congreso Ordinario de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM).
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