
“Es muy aventurado decir que, con los datos (económicos) observados ahora, estemos actualmente en una recesión”, aseguró este martes el Jefe de la Unidad de Planeación Económica de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Rodrigo Mariscal Paredes, al participar en el foro “Impulsando la competitividad de América del Norte” organizado por el Council of the Americas.
El funcionario insistió en que México no atraviesa por una recesión, mientras se apuesta por posicionarse como actor estratégico en medio de una reconfiguración de la economía regional con las tensiones comerciales desatadas por Estados Unidos.
Rodrigo Mariscal Paredes subrayó que a pesar de la complejidad del entorno internacional, la economía nacional mantiene signos de fortaleza estructural y dinamismo.
Sobre las versiones de que el país ya entró en recesión, el funcionario de Hacienda refirió que aún no se cumplen tres criterios clave para considerar que el país está en recesión: profundidad, duración y generalización, en medio de pronósticos de organismos internacionales, agencias calificadoras y entidades financieras que apuntan a este escenario.
En la misma línea, apuntó que sectores como el de servicios siguen creciendo y el mercado laboral presenta aumentos sostenidos en salarios y ahorro, lo que brinda resiliencia a los hogares.
Sin embargo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó abruptamente sus previsiones económicas para México al pronosticar en abril pasado una contracción del PIB del 0.3 por ciento, debido al impacto de las medidas proteccionistas de Estados Unidos en su actividad económica.
Para sustentar la exposición del funcionario de la SHCP, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, quien también participó en este foro, señaló que el Gobierno Federal trabaja en un ambicioso portafolio de más de dos mil proyectos de inversión privada, nacional e internacional que suman cerca de 298 mil millones de dólares.
Asimismo, refirió que la oportunidad histórica para México radica en la transformación de las cadenas globales de suministro hacia un modelo regional.
“Va a venir una nueva economía para la región (…) tenemos que tener muy claro que vamos a una región mucho más integrada de lo que era porque la realidad no lo va a imponer. Simplemente es un término de costos y de eficacia geopolítica”, enfatizó.