
La mayoría de las empresas fracasa no por falta de clientes, ni por falta de talento o producto. Fracasan por falta de liquidez. Esa es la conclusión central del estudio “Elevando la Madurez Financiera en las Empresas Mexicanas: Análisis y Recomendaciones Estratégicas”, realizado por la fintech Xepelin en 2024.
Según datos del propio INEGI, los resultados son tan reveladores como preocupantes: el 70% de las empresas cierran antes de cumplir cinco años. Y de ese universo, el 75% quiebra por no haber realizado una adecuada planificación financiera. La falta de herramientas, conocimiento y estructuras para anticipar escenarios adversos sigue siendo uno de los retos más urgentes para el ecosistema empresarial.
La radiografía: cómo administran sus finanzas las empresas
El estudio, encuestó a cientos de empresas y clasificó su madurez financiera en cuatro niveles:
- Gestión Reactiva (40%): Empresas que operan sin presupuestos ni controles financieros. Gasto sin planeación.
- Gestión Organizada (30%): Cuentan con presupuestos pero carecen de proyecciones ante imprevistos
- Gestión Proactiva (20%): Utilizan herramientas para analizar su flujo de caja y tienen estrategias ante imprevistos.
- Gestión Estratégica (10%): Integran sus decisiones financieras con la visión a largo plazo del negocio. Analizan riesgos, oportunidades y desempeño real frente a presupuestos.
“Aún hay muchas empresas que funcionan de forma reactiva, muchas empresas en México no han alcanzado una madurez financiera proactiva. Es decir, carecen de presupuestos, planeación, orden y una adecuada gestión de caja, señala Alejandro Toiber, country manager de Xepelin en México, en entrevista con La Crónica de Hoy. “Y eso es lo que estamos tratando de cambiar”, afirma.
¿Por qué fracasan las pymes?
Toiber es claro: “Las empresas no fracasan por malas ideas o porque sus productos no sean buenos. Fracasan por flujo de efectivo. Suelen gastar conforme reciben ingresos, sin una proyección clara de su flujo de efectivo. Esto significa que no visualizan con anticipación situaciones como: ‘Este es el dinero que voy a recibir en lo que resta del mes, estos son los pagos que debo cubrir, y este día debo pagar la nómina, pero mi cliente quizá me pague uno o dos días después’. En consecuencia, no identifican a tiempo los desfases de liquidez ni toman medidas para financiar ese diferencial”.
“Los empresarios son excelentes operadores: saben vender, producir, hacer alianzas. Pero no necesariamente son expertos en administración financiera. Y esa es la brecha que queremos cerrar”, agrega.
La tecnología como respuesta: ¿puede un software convertirse en tu CFO?
Desde su fundación en Chile en 2019, Xepelin se ha enfocado en desarrollar tecnología financiera para empresas. Su propuesta: convertirse en el CFO digital de miles de pymes en América Latina.
¿Qué implica eso? “Queremos darle al empresario las herramientas de un CFO internacional”, dice Toiber. “Es una persona que planea, que toma decisiones y que tiene un perfil analítico capaz de revisar la información del negocio para proponer planes de acción y estrategias a seguir. Dentro de la empresa, es quien lleva el hilo conductor entre las distintas áreas, con el objetivo de mejorar la rentabilidad, la productividad y los márgenes.”
Xepelin integra inteligencia artificial y machine learning para ofrecer a cada empresa una vista 360 de su negocio: ventas, compras, cuentas por pagar, clientes estratégicos, gastos recurrentes y riesgos de liquidez. Todo esto en tiempo real, desde una interfaz digital gratuita.
Entre sus herramientas destacan:
- Excalendar: Proyección de flujo de caja con IA.
- Exdata: Evaluación de riesgo de proveedores y clientes.
- Alertas inteligentes: Recordatorios de pago, vencimientos y recomendaciones de acción.
- Dashboard financiero personalizado: Visualización integral de ingresos, egresos y márgenes.
Un respaldo clave: BBVA Spark otorga 300 millones de pesos a Xepelin
El crecimiento de Xepelin ha despertado la atención del sector bancario tradicional. En junio de 2025, la empresa anunció un acuerdo con BBVA Spark por 300 millones de pesos en financiamiento, destinados a consolidar su presencia en México para atender las necesidades de las pequeñas y medianas empresas del país.
Con más de 50,000 empresas usuarias en la región y presencia en múltiples países, Xepelin está posicionándose como un actor clave en la transformación digital del ecosistema empresarial.
Seguridad y regulación: las nuevas reglas del juego
Una de las barreras históricas para la adopción de soluciones fintech ha sido la desconfianza. ¿Qué tan seguros son estos sistemas? ¿Dónde quedan los datos de los clientes?
Toiber asegura que Xepelin opera bajo estándares internacionales de ciberseguridad y cumple con las regulaciones mexicanas en materia de protección de datos y supervisión financiera. “Tenemos un equipo dedicado exclusivamente a ciberseguridad. Usamos estrategias como el buscamiento de datos, segregación de información, temas que tienen que ver con controles de acceso duales, accesos de información y la información se guarda en diferentes niveles de profundidad. Usamos las mejores herramientas de tecnología para asegurar la integridad de la información, la conservación de la misma, pero sobre todo que no sea vulnerable”, afirma.
Además, son auditados de forma constante tanto por autoridades como por sus propios inversionistas.
Conclusión: pasar de sobrevivir a planear
La madurez financiera ya no es un valor agregado. Es un factor de supervivencia. La tecnología está disponible. El financiamiento también. Lo que falta, según Xepelin, es dar el paso hacia una nueva cultura empresarial donde el empresario no solo trabaje en su negocio, sino también para su negocio.