Hoy, hablar de la omnicanalidad como estrategia de ventas es cada vez más común. Pero, ¿qué es exactamente?, ¿cómo funciona y por qué es diferente de una estrategia multicanal?, ¿cómo puede ayudarte a optimizar los pagos?

¿Qué es omnicanal?

Cuando hablamos de omnicanalidad, nos referimos a la integración de distintos canales, tanto online como offline, que permite que los clientes puedan interactuar con una marca y comprar desde su celular, un sitio web o una tienda física.

Un flujo omnicanal puede verse así:

Una persona entra a la app de una tienda de electrónicos para buscar productos y leer reseñas antes de tomar una decisión.

Luego, acude a la tienda para resolver sus dudas con los colaboradores antes de hacer la compra.

Días después, compra el producto a través del sitio web y decide recogerlo en tienda.

Su experiencia mobile, online y física fue fácil y consistente, y esto eleva la percepción que se tiene de la marca, así como las probabilidades de volver a comprar con ella.

Omnicanal vs. multicanal: experiencias que hacen la diferencia

Algo queda claro: multicanal y omnicanal no son lo mismo. La diferencia principal es que, mientras la omnicanalidad basa su estrategia alrededor de la experiencia del cliente, la multicanalidad tiene al producto en el centro de su estrategia y sus canales operan de forma independiente.

Hoy en día, los consumidores buscan experiencias de compra fluidas y personalizadas, por lo que contar con una estrategia omnicanal ya no es una novedad sino un requisito. Sin embargo, la omnicanalidad también debe evolucionar y solucionar uno de los problemas que puede causar fricciones en la experiencia de los clientes: los pagos.

Comercio unificado: hacia una nueva omnicanalidad

Los pagos son la clave para una experiencia de compra exitosa, ya que un checkout lento, tasas de rechazo altas o no aceptar distintas formas de pago pueden convencer a un cliente de no volver.

Para las marcas, esto representa un reto y una oportunidad para innovar en su tecnología de pago y personalizar la experiencia de sus clientes. No obstante, la contratación de distintos proveedores y no tener una plataforma de pagos integrada a un solo sistema backend puede dificultar las cosas.

El comercio unificado es la solución para las empresas que buscan una plataforma de pagos que conecte todos los canales online y offline a un solo backend. Gracias a esta integración, se puede hacer un mejor análisis de los datos de pago, entender el comportamiento de los clientes y obtener beneficios como:

Experiencias de compra personalizadas

Mayor lealtad de los clientes

Reportes consolidados y eficiencia operativa

Consolidar tus pagos en un solo sistema trae ventajas tanto para tus clientes como para los ingresos de tu empresa. ¿Listo para impulsar tu estrategia omnicanal?