El precio emocional es un valor agregado que un consumidor le asigna a un producto o servicio, basándose en sus sentimientos, historias e incluso experiencias, este va más allá del valor racional o real.

Este precio emocional se ha visto reflejando en el mercado inmobiliario, es por eso que, Propiedades.com realizó un estudio, utilizando datos de mayo de 2023 a la fecha, en el que identificó el diferencial entre el valor de mercado de las propiedades y el precio sentimental que las personas asignan a sus inmuebles  al monten de ponerlos en venta.

Identificar este sobreprecio emocional es importante, ya que puede afectar el dinamismo del sector, así como generar frustraciones entre los participantes.

En dicho análisis se detectó que el precio emocional incrementa en promedio un 15 por ciento el valor de los inmuebles. Asimismo, este sobreprecio tiene comportamientos diferentes, en propiedades con un valor inferior a los dos millones de pesos tienen una brecha de entre cuatro por ciento y 15 por cientos de incremento de su valor comercial. Se cree que esto es debido a que los propietarios de los inmuebles  perciben un mayor esfuerzo para obtenerlos, provocando que al venderlos sientan que cuestan más.

Otro factor que influye en este valor emocional es la antigüedad de las propiedades, llegando a mostrar una diferencia entre cinco por ciento y 10 por ciento, por encima del valor real.

De igual forma, este estudio mostró, que los inmuebles más costosos y de gran tamaño, superando los 200 metros cuadrados y con precios superiores a los tres millones de pesos, muestran un sesgo emocional bajo e incluso nulo

Finalmente, el manager Propiedades.com., Juan David Vargas comentó que, “estos hallazgos subrayan la importancia de conocer y asignar el valor comercial en las transacciones inmobiliarias, ya que hemos visto cómo los inmuebles con un valor comercial acorde al mercado son más competitivos con hasta un 28% de incremento en su rotación”.