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Logró escapar en seis ocasiones, pero al intentarlo por séptima vez, el líder del Cártel del Golfo, Juan Manuel Loisa Salinas, El Comandante Toro, fue abatido en Reynosa, Tamaulipas, por la Marina Armada de México la madrugada del sábado.
Su muerte desencadenó 32 bloqueos, la quema de vehículos y comercios en distintos puntos de la convulsionada ciudad fronteriza con Estados Unidos, realizados por los integrantes de la organización criminal.
Los habitantes del municipio vivieron una jornada de terror.
Loisa Salinas, considerado responsable del repunte de la violencia en esa zona de la entidad, se convirtió en los últimos meses en un dolor de cabeza para las fuerzas de seguridad federal y estatal, debido a la red de protección que construyó y que le permitió burlar las ofensivas de la Marina en distintas ocasiones.
Según autoridades, el delincuente disputaba a Los Zetas, acérrimos rivales del Cártel del Golfo con el que se han enfrentado en muchas ocasiones, el control de la zona para el trasiego de droga, robo de combustible y tráfico de armas.
De acuerdo con el comandante de la primera Región Naval, Francisco Rico Pérez, quien informó de los eventos violentos del día a través de una conferencia de prensa, El Comandante Toro fue ubicado cuando viajaba en un vehículo por calles de la colonia Lucio Blanco de la localidad y al notar la presencia de personal de la Armada de México aceleró impactándose contra un árbol.
Al descender, informó el vicealmirante en conferencia de prensa, los tripulantes abrieron fuego contra los marinos quienes al repeler la agresión abatieron al peligroso delincuente.
“Se le aseguró un arma larga y un vehículo. Como consecuencia se registraron una serie de bloqueos, quema de vehículos y comercios en varias zonas de la ciudad por parte de presuntos delincuentes”, indicó.
En varios enfrentamientos, ocurridos el 17 de febrero de este año, murieron siete presuntos sicarios a su servicio.
Ese día, personas ligadas al líder del Cártel del Golfo, colocaron una narcomanta en un puente peatonal de Reynosa, junto con dos personas con vida atadas de pies y manos, en la que negaba haber ordenado extorsiones, secuestros y robos en Reynosa.
No obstante, el objetivo principal en Tamaulipas había logrado eludir a sus perseguidores hasta ayer.
Rico Pérez señaló que en otra acción distinta, personal de infantería de Marina abatió también a Francisco Carreón, Pancho Carreón, capo de Los Zetas, al responder una agresión sobre la carretera Llera de Canales-Ciudad Victoria.
Pancho Carreón era considerado jefe de Los Zetas en la zona de Mante y región cañera de Tamaulipas.
En este choque, dijo, se aseguraron tres armas largas, equipo táctico, cargadores, municiones y un vehículo.
“Es importante destacar que durante el enfrentamiento y derivado de una efectiva coordinación de las fuerzas federales y estatales, ningún elemento de éstas, ni civiles resultaron lesionados”, destacó.
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