Opinión

Actitud positiva

Actitud positiva

Actitud positiva

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Hay muchos eventos en la vida que no podemos controlar, pero lo que sí podemos controlar es nuestra mente, nuestros pensamientos, nuestra animosidad, nuestra forma de ver las cosas, buscando el lado positivo de todas las personas y circunstancias por las que atravesamos.

De nuestra actitud ante la vida depende nuestra felicidad y también la realización de nuestros ideales. La actitud positiva entraña optimismo, nos ayuda a superar nuestras deficiencias pues al enfocarnos en lo positivo encontramos más soluciones a nuestros problemas y evitamos grabar nuestra alma con decepciones. Además, la actitud positiva se contagia, se expande y transmite esperanza a nuestros semejantes.

En cualquier situación o circunstancia podemos elegir cómo pensar y cómo sentirnos. Si pensamos alentadoramente nos sentiremos esperanzados y avanzaremos con confianza, aun cuando la realidad insista en mostrarnos signos adversos, ¿no es mejor acaso mantener nuestra fuerza y alegría interior para enfrentar cualquier problema?

Por otra parte, está comprobado que las personas positivas enferman menos que las negativas puesto que no perciben los errores con angustia como estos últimos; Por tanto, no sufren depresión y manejan mejor el estrés.

Tener una actitud positiva nos ayuda a ser más alegres a comprender mejor los problemas por los que atravesamos y hasta bendecir los fracasos que tuvimos para llegar hasta donde estamos.

Quien tiene una actitud positiva se enfoca en todas las bendiciones que le rodean en lugar de centrar la atención en sus carencias. Piensa que todas sus circunstancias pueden mejorarse y siempre está en espera de los milagros. Reconoce que existe la negatividad, pero opta por no verla y sigue su camino de optimismo a pesar de todos los signos que le muestren lo contrario.

Quien tiene una actitud positiva normalmente sabe por qué y para qué está desarrollando sus actividades cotidianas y lo hace con la confianza de que todo será para su bien.

El optimista no es pasivo sino todo lo contrario, es arriesgado y aguerrido empuja siempre para adelante, ya que sabe que las circunstancias de nuestra vida no cambian si no hacemos nada, y que las crisis en nuestra vida son pruebas para superarlas, pero siempre está seguro de que en lo que él participe ofrecerá una respuesta favorable.

Las personas con una actitud positiva ante la vida saben qué aplicar la acción y la voluntad unidas producen resultados sorprendentes. Saben también que la felicidad no es una meta, sino un trayecto o un sendero, que el día de hoy, es lo único que realmente tenemos, puesto que el pasado ya pasó y del futuro no sabemos nada. Por lo tanto, solo hoy podemos ser felices.

Las personas positivas siempre encauzan su voluntad en favor de metas altruistas y generosas que beneficien a sus semejantes, pues ahí descansa la verdadera felicidad.

Por lo anterior estoy convencida que es mejor ser optimistas pues ello nos brinda más felicidad, en comparación a las personas que siempre piensan que todo empeorará y por ende se la pasan quejándose y sintiéndose eternamente infelices.

Mail: corzoalma17@yahoo.com