Aunque el ritmo de construcción es superior al registrado en las obras de Texcoco, la Sedena deberá multiplicar el trabajo para cumplir la fecha de entrega del Aeropuerto Felipe Ángeles de Santa Lucía (AIFA), comprometida para el 21 de marzo de 2022.

Hasta ahora, presenta un déficit en el avance, al menos numérico: cuando han transcurrido 153 días de los 886 considerados en el proyecto, más del 17 por ciento del tiempo convenido, se ha adelantado sólo el 7.3 por ciento de la obra.

En promedio, se ha avanzado el 1 por ciento cada 21 días. A esta velocidad, el puerto aéreo estaría listo hasta julio de 2025, 10 meses después de culminado el gobierno lopezobradorista y 3 años cuatro meses más tarde de lo planificado.

Para solventar el 92.63 por ciento restante en los 733 días aún disponibles, sería necesario triplicar la rapidez en las labores, y progresar un 1 por ciento cada 7 u 8 días.

Sobre estos rezagos estadísticos, Ricardo Vallejo Suárez, comandante del agrupamiento de ingenieros de la Defensa y encargado del complejo, señaló a Crónica: “Una ruta de trabajo efectivamente empieza con pendientes suaves de avance, posteriormente llega una etapa de plenitud donde tenemos un alto porcentaje de avance y volvemos a decrecer”.

Este comportamiento, dijo, se origina por los trabajos iniciales de trazo, nivelación y excavación: “Son enormes, millones de metros cúbicos. Una vez que tengamos la cimentación, empiezan más subsistemas, la estructura y las redes, y entonces se multiplica el avance”.

Sí admitió un tiempo de ejecución “reducido, porque es una obra de seguridad nacional, porque tenemos que construir rápido, porque hay un aeropuerto saturado donde se incrementan los pasajeros y tememos que aliviarlo, y una base aérea que tiene que seguir realizando operaciones aéreas”.

Sin embargo, se comprometió a “cumplir la misión en tiempo y forma”.

—¿Sería flexible en la fecha del 21 de marzo de 2022 para que no haya prisas, se eviten vicios ocultos y se cuide el prestigio de la Sedena? -preguntó este diario al presidente Andrés Manuel López Obrador.

—No, porque no son ocurrencias, son planes bien diseñados y con recursos suficientes y ejecutados de manera profesional.

RECURSOS. Al menos 15 mil millones de pesos se destinarán en obras de conectividad del nuevo aeropuerto y redes viales aledañas, dijo a Crónica Cedric Iván Escalante, subsecretario de Infraestructura de la SCT.

“Las obras que se están planteando no sólo son para la conectividad entre aeropuertos (el de Santa Lucía, el de la CDMX y el de Toluca), se trata de una red vial que proporcionará enormes beneficios a la movilidad regional y a algunas vías saturadas, como la autopista México-Pachuca”.

El monto de los recursos fiscales es de mil 950 millones de pesos, “para la modernización de la carretera México-Pachuca, el acceso libre de Tonanitla, el acceso oriente, la modernización del camino San Jerónimo y viaductos elevados”.

Otros 13 mil millones de pesos provendrán de un fideicomiso denominado Golfo-Centro, el cual es manejado por el Fondo Nacional de Infraestructura.