De un plumazo, sin evidencia estadística que sustenten las cifras reales de vacunación contra la COVID-19, el presidente Andrés Manuel López Obrador, con sus propios datos como es costumbre, aseguró este martes en Palacio Nacional que se cumplió la meta de vacunar a 11 millones de adultos mayores de 60 años y más, cuando las cifras reales que la misma administración de la 4T pregonó que era 15 millones, lo que deja en duda de qué paso con 4 millones de mexicanos que ya no aparecen en los números de las personas que al menos hayan recibido alguna de las dos dosis antiCOVID.

Sin un sustento que explique el cambio en el número de adultos mayores de 60 años que han recibido algunas de las dos dosis de alguna de la vacunas contra el SARS_CoV_2, el mandatario simplemente aprovechó el púlpito de Palacio Nacional para asegurar que se cumplió otro objetivo, lo que dista mucho de la realidad que se vive en el país, con ausencia de vacunas para una segunda dosis en varios estados, entre ellas las alcaldía Iztapalapa y Tlalpan en la Ciudad de México, donde aún no hay fecha para la aplicación de la segunda dosis de las vacunas, pero el presidente ya echó las campanas al vuelo y dice que este punto ya se cumplió y da vuelta a la hoja para dar apertura ahora al grupo de las personas de 50 a 59 años.

Los argumentos cantados por el presidente para tratar de justificar sus números es que muchos adultos mayores han renegado de ponerse algunas de las vacunas. Sin embargo, largas filas de viejitos que han pernoctado afuera de los centros de vacunación exhiben que existe un interés real por este sector de la sociedad en recibir la vacuna, por lo que es difícil pensar que 30 de cada 100 mexicanos adultos mayores rechacen alguna de estas dosis.

O al presidente le fallan sus datos, o quienes lo asesoran desconocen las cifras reales de adultos mayores que han sido registrados tanto por internet, vía telefónica o por los propios Servidores de la Nación para recibir la vacuna.

La realidad es que hay un vacío de 4 millones de adultos mayores a los que el gobierno de la 4T desapareció de su lista para gritar a los cuatro vientos que la misión está cumplida, sin ser cierto.