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BofA prevé caída del PIB de 10% y pérdida de un millón de empleos

BofA Global Research espera que la economía mexicana de contraiga 10 por ciento en 2020, derivado de la crisis generada por el Covid-19, lo que implicaría la pérdida de más de un millón de empleos formales.

BofA prevé caída del PIB de 10% y pérdida de un millón de empleos

BofA prevé caída del PIB de 10% y pérdida de un millón de empleos

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

BofA Global Research espera que la economía mexicana de contraiga 10 por ciento en 2020, derivado de la crisis generada por el COVID-19, lo que implicaría la pérdida de más de un millón de empleos formales.

De acuerdo con la institución financiera, el Producto Interno Bruto (PIB) de México se contraerá 12.7 por ciento en el segundo trimestre, 12.9 por ciento en el tercero y 12.7 por ciento en el cuarto; pero para 2021 espera una recuperación y crezca 2.0 por ciento.

“Esperamos que la recuperación tenga una forma de U alargada que probablemente dejará el nivel de PIB por debajo del nivel previo al coronavirus incluso para fines de 2021. Una recesión tan profunda terminaría con más de un millón de empleos formales en 2020”.

El análisis del banco considera que las decisiones de la administración actual siguen siendo perjudiciales para la inversión privada, y el ejemplo más reciente es el 15 de mayo, cuando México aceleró las medidas para dar al gobierno más control sobre quién puede generar energía, dónde pueden operar y cuánto pueden producir.

“Las medidas contravienen la legislación de la reforma energética y frenan la participación privada en el mercado eléctrico, consolidando la generación en la empresa de servicios públicos (CFE). El cambio de la noche a la mañana en las reglas del sector eléctrico pone en peligro la viabilidad de las inversiones privadas en curso, en nuestra opinión”.

Asimismo, consideró que la respuesta a la emergencia de salud tampoco conduce a una recuperación rápida, ya que el país decidió limitar las pruebas, lo que probablemente mantendrá la demanda de servicios limitada incluso cuando se levanten las restricciones de suministro, lo que provocará una recuperación débil.

Para la institución financiera, una caída profunda de la actividad y una recuperación débil podrían retroalimentar la radicalización de las políticas, ya que a medida que aumentan los problemas económicos, el ala más radical del gabinete (principalmente en energía) podría aumentar de peso en la toma de decisiones.

“Hemos visto un cambio radical en la formulación de políticas desde la aparición del coronavirus, y a medida que la economía se debilita, creemos que es probable que esto continúe o incluso se intensifique”.

Expuso que la incertidumbre es alta en torno a las previsiones económicas, ya que el desarrollo de la economía es incierto y hay incertidumbre con respecto que tan profundo puede caer la economía y lo débil que sería la recuperación.

ijsm