La jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, descartó el retiro forzado de integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) que instalaron casas de campaña en el arroyo vehicular frente a uno de los edificios de la administración capitalina y de Palacio Nacional, en el Zócalo.

En entrevista, dijo que no habrá represión contra los manifestantes y recordó que los programas sociales y beneficios se otorgan ahora de forma directa, sin intermediarios.

“Es libre manifestación, nosotros no vamos a reprimir. Sencillamente es muy importante que, igual que ha mencionado el gobierno de México, el presidente de la República; nosotros tenemos la misma política, los programas sociales, los beneficios ahora son directo a la ciudadanía, ya no se requiere de intermediarios”, indicó.

Sobre las quejas por la afectación vehicular y peatonal que provocan estas personas en la mitad del circuito de Plaza de la Constitución, insistió que “es fundamental que haya diálogo, que haya democracia y no caer en provocaciones”.

Los manifestantes de la UNTA, encabezados por Álvaro Ríos, solicitan que los apoyos al campo sean otorgados a través de las organizaciones agrarias y campesinas.

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