Opinión

Combatir la corrupción respetando derechos, desafío de la 4T

Combatir la corrupción respetando derechos, desafío de la 4T

Combatir la corrupción respetando derechos, desafío de la 4T

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Han pasado más de 30 meses desde que el gobierno del presidente López Obrador ganó las históricas elecciones que lo llevaron al Poder Ejecutivo.

En las finanzas públicas del país tenemos un balance positivo. México, a diferencia de muchos países, tiene una deuda de 63% respecto del PIB. Frente a la contratación galopante de pasivos por parte de otros gobiernos, el apalancamiento de las finanzas públicas se presenta manejable y hasta atractivo para la inversión de portafolios. Los inversionistas descartan una crisis de pagos a pesar de que Pemex necesita recursos del gobierno federal para su operación.

La economía avanza gracias a la integración con los mercados de Estados Unidos y Canadá. Se crean empleos ligados a la industria manufacturera. El turismo y el sector servicios desafían los contagios por Covid-19 y se confirma que somos un país con trabajadores altamente resilientes. La Secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, ha librado una gran batalla para cambiar las condiciones ilegales en las que trabajaban muchos mexicanos bajo los oscuros esquemas de subcontratación.

El presidente López Obrador declara que la economía avanza por buen camino y muchos indicadores le dan la razón mientras la inflación que, en términos anuales, sigue recibiendo presiones por los incrementos en combustibles, principalmente del exterior, se presenta como la gran amenaza para el crecimiento del PIB.

Por ello, resulta tan importante que, en esta mitad de sexenio, el gobierno lopezobradorista revise la eficacia de la gestión gubernamental, la eficiencia de la burocracia al frente del cambio, de la Cuarta Transformación.

Rencuentro y desencuentro

Cuando el presidente López Obrador instruyó a la Secretaría de Hacienda, en especial a la Oficial Mayor, Raquel Buenrostro, para que se concentrara la toma de decisiones en materia de compras y adquisiciones para evitar no sólo la corrupción sino el dispendio, se giraron varios oficios en los que se daban instrucciones precisas sobre creación de plazas, contratación de servicios, adquisiciones, licitaciones y toda actividad que involucrara recursos.

Desde la SHCP pero también desde las dependencias, consideradas cabeza de sector, se nombró a los directores de administración con el propósito de establecer una línea directa.

Durante los primeros meses funcionó la reducción de gastos superfluos, se cancelaron muchas partidas y muchas posiciones en los organigramas. El problema se ha presentado, sin embargo, en dos vertientes: los problemas jerárquicos en esas instituciones y dependencias que han generado el cruce de indicaciones, de líneas de mando y, por supuesto, de eficacia. El director de una entidad no siempre tiene las decisiones administrativas y sólo se ocupa de la ejecución operativa y de las políticas públicas.

El otro problema es el más grave porque podría costarle al gobierno federal, a la administración pública, la acumulación de deudas por juicios laborales o por incumplimientos en contratos.

Así que el desafío no es menor porque también podría presentarse un pasivo muy grande para las arcas públicas contrario al espíritu bien intencionado de las políticas de austeridad. Los trabajadores de confianza, los que laboraban bajo el Servicio Profesional de Carrera buscan desde ahora que sus derechos se reconozcan. Los despachos de abogados que atienden estos casos ya acumulan casos y evidencias para litigar los casos de despidos injustificados o aquellos que no recibieron sus liquidaciones en tiempo y forma.

Problemas con administración en Infonacot

El Bansefi, por ejemplo, hizo a un lado de un plumazo los derechos de trabajadores. No son pocos los casos que se litigan en tribunales y que están a punto de ganarse en beneficio de los demandantes. En el Infonacot, de acuerdo con denuncias públicas y hasta mensajes en redes sociales a la titular del trabajo, Luisa María Alcalde, le está sucediendo lo mismo con un gran deterioro de su clima laboral. No sólo se trata de trabajadores que defienden sus derechos laborales sino de proveedores con contratos firmados que se hacían cargo de los servicios de cobranza del instituto.

Sabemos que el Órgano Interno de Control del Infonacot ya realizó recomendaciones directas al responsable de la administración, Gerardo Cornejo. La intención del OIC que, como usted sabe, depende de la Secretaría de la Función Pública, es que no se violenten derechos que, en el corto plazo, pudieran dañar el patrimonio y el presupuesto de la institución.

En uno días, el Consejo de Administración del Infonacot, en donde se registra una participación tripartita con asientos para el sector obrero, empresarial y del gobierno federal, revisará y aprobará en su caso los estados financieros del instituto, en donde no se presentará problemas porque la gestión de sus operaciones ha sido avalada por diferentes instancias y hasta por la Auditoría Superior de la Federación. El problema estará en la gestión de Cornejo y las demandas ante tribunales que ha provocado su gestión.

Maestro en Economía y responsable de la administración del Infonacot, Gerardo Cornejo, conoció a Luisa María Alcalde en el norte del país y se ganó su confianza cuando integró con mucho éxito un grupo de fuerzas juveniles para Morena. Cornejo es idealista, con posición ideológica de izquierda pero no debería olvidar que el respeto de las leyes, sobre todo las laborales en un instituto que depende de la Secretaría de Trabajo debería ser la prioridad.