Metrópoli

Con engaños, la Fiscalía de la CDMX separa a dos hijas de su padre

Esta no es la primera vez que las autoridades de la FGJ se prestan para la manipulación de un proceso, y en el caso de Fernando y sus niñas, está vigente el engaño en el que participaron autoridades de la alcaldía Tláhuac

Con engaños, la Fiscalía de la CDMX separa a dos hijas de su padre

Con engaños, la Fiscalía de la CDMX separa a dos hijas de su padre

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Después de más de 21 horas retenidas en la Agencia número 59 del Ministerio Público capitalino, encargada de Investigar los Delitos Cometidos en Agravio de Niños, Niñas y Adolescentes, dos jovencitas de 15 y 17 años de edad que habían acudido con su padre, Fernando, ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CDMX), para dar seguimiento a una denuncia de violencia infantil por parte de la madre, se encontraron con la noticia de que al existir un proceso legal por la custodia, sin importar si las menores son víctimas de maltrato por parte de su tutora, ambas jovencitas quedarían retenidas y bajo custodia de las autoridades del DIF, violentando con ello los derechos de las niñas para decidir con qué familiar querían irse por sentirse seguras, por lo que después de casi un día completo de manipulación y retención de las niñas, éstas fueron “arrebatadas” y entregadas a un familiar de la presunta agresora.

Tal y como ya había ocurrido en ocasiones anteriores, las autoridades de la FGJ capitalina volvieron a prestarse a la manipulación en beneficio de los intereses de la tutora demandada y amiga de funcionarios de dicha instancia del gobierno local, para “arrebatar” con engaños y sin tomar en cuenta los derechos y decisión de las menores, sobre la custodia y protección que les brinda su padre, quien tras conocer la violencia de la que son víctimas sus hijas, se ha hecho cargo y ha acudido ante las autoridades correspondientes para denunciar la situación, pero se ha encontrado con qué para las autoridades, él es el supuesto responsable.

Desde las 10 de la mañana comenzó la pesadilla para Fernando y sus niñas, ya que a esa hora de la mañana del martes 27 de julio de 2021, de manera puntual, acudieron a la agencia del MP de la colonia Doctores, en la alcaldía Cuauhtémoc, para dar continuidad a una demanda presentada por violencia y maltrato contra las dos niñas por parte de la madre.

Sin embargo, la situación dio un giro y con engaños por parte del personal del MP que se encuentra en el Búnker de la FGJ, se envió a las dos menores a la Agencia 59, con el argumento de que sería para un simple chequeo psicológico, pero que no era nada de cuidado.

Las horas pasaron y Fernando necesitaba saber qué sucedía con el estudio psicológico de sus niñas y por qué no estaban nuevamente con él, ya que no le daban noticias de ello, por lo que solicitó entrar y hablar con el responsable de la Agencia 59 y saber lo que ocurría.

Con pretextos, los encargados de atender el ingreso a la citada agencia del MP le dijeron que tenía que esperar su turno hasta ser atendido, lo que ocurrió después de varias horas de insistencia, pero donde sólo le notificaron que sus hijas quedarían retenidas en la dependencia, bajo resguardo del DIF, ya que estaba el antecedente de un proceso legal por la custodia de las menores, por lo que ya le habían notificado a la madre para que se presentara a esta agencia y corroborara la situación que copete a sus hijas y sobre la demanda en su contra.

La PGJ capitalina, a cargo de Ernestina Godoy, ha subrayado que la agencia 59 es una estancia del gobierno capitalino que se encargaría de llevar a cabo procesos de revisión y análisis de atención, protección integral y cuidados alternativos para niños, niñas y adolescentes, estando sobre cualquier cosa los derechos y reclamos de los menores, a los que se les brindará protección.

Sin embargo, esta retórica y buena intención de lo que pretende la Fiscalía de la CDMX está muy lejos de cumplirse, ya que el caso de Fernando no es el único en el que la corrupción y el influyentismo están primero, antes que la atención, derechos y salud de los infantes.

Fernando dijo a Crónica que él ha acudido formalmente y en todo momento con sus hijas, para presentar las denuncias y pruebas que tienen en su poder, sobre el maltrato y violencia que sufren sus hijas por parte de la madre, pero en lugar de avanzar en el proceso, se ha encontrado con muchos obstáculos y mentiras por parte de las mismas autoridades, que anteponen intereses ajenos a los derechos y salud de sus hijas, en beneficio de la madre demandada, con quien las autoridades de la Fiscalía tienen amistad.

Desde que le fue notificada la retención de sus hijas, Fernando aguardó en todo momento noticias de las propias autoridades de la Agencia 59, mientras su representante jurídica, Amalia Bello Orta, gestionaba que se les permitiera ver a las niñas y hablar con el titular del MP y del DIF, lo que fue negado en varias ocasiones.

Sin saber que otra acción legal emprender para recuperar a sus hijas, Fernando regresó al MP en el Búnker para informar sobre la retención de sus niñas y, personal de la citada agencia, con total indiferencia y sin dar detalles sobre lo acontecido y por qué las niñas quedaron bajo custodia del DIF, la respuesta del representante de la FGJ fue: “Aquí ya no procede nada, en la Agencia 59 se hará cargo el DIF del proceso”. De esta manera se deslindaron de la situación, cuando fue desde esa instancia que se turnó con engaños el envío de las menores para el “supuesto chequeo psicológico”.

Las horas pasaron y fue hasta después de la 7 de la noche en el que la madre de las jovencitas llegó a la Agencia 59, se anotó en el libro de ingresos para esperar turno, pero sin demora se dirigió a la barandilla y con un saludo a los oficiales de turno entró sin aguardar a que la llamaran como a las demás personas que tenían horas en el exterior en espera de entrar, lo que fue constatado por Crónica.

Cerca de las 9 de la noche, Fernando y su representante jurídica lograron entrar y hablar con el responsable del DIF, quien les informó que en turnos separados, hablaría él y la madre de las niñas sobre la situación de las menores y evaluar, según el caso, con quién se irían las menores o en caso contrario quedarían bajo custodia del DIF mientras se desarrolla el juicio legal por la custodia y sobre la demanda por violencia y maltrato contra la tutora.

Pasados los primeros minutos del miércoles 28 de julio, les fue notificado que al haber una denuncia contra la madre por maltrato infantil, la custodia de ésta se anulaba y mientras se daría seguimiento al proceso legal en un juicio, para que se decida quién asumirá la responsabilidad total de las menores.

Tras esta notificación, también se les comunicó que la custodia de las niñas, como única opción viable, según les argumentaron, era que algún familiar cercano a la madre sería la que quedaría como responsable.

De acuerdo con personal de la Agencia 59, a las menores les informaron que la única opción que tenían para irse con un familiar que no fueran ni su papá ni la mamá, era que a través de un escrito señalaran a un familiar cercano a la madre con quien quisieran estar, ya que habría un proceso legal en el que por lo pronto no podrían estar con ninguno de ellos, por lo que, según los argumentos del personal del MP, es que una de las menores, a través de un escrito, supuestamente señala a su tía, hermana de su mamá, como la que sería responsable de ellas. En este proceso no le dieron otra opción a las menores de decidir si querían también irse con algún familiar de su papá.

Fue cerca de las 6:30 horas de la mañana cuando las dos jovencitas fueron sacadas por la entrada principal de la Agencia 59 del MP y a las que subieron a un auto que ya las aguardaba y a las que en ningún momento les permitieron siquiera despedirse de su papá.

Esta no es la primera vez que las autoridades de la FGJ se prestan para la manipulación de un proceso, y en el caso de Fernando y sus niñas, está vigente el engaño en el que participaron autoridades de la alcaldía Tláhuac, donde la coordinación de la Fiscalía de la Ciudad de México en esa demarcación, echando mano del engaño y el abuso de autoridad, lanzó dolosamente una falsa Alerta Amber en torno a las dos menores, hijas de Fernando, señalándolo a él como el sustractor de las mismas, aun cuando las niñas estuvieron siempre en el domicilio que establecen los documentos de custodia (lo que fue corroborado por elementos de la propia fiscalía).

El importante destacar que aunque la representante jurídica de Fernando ya notificó para que esta falsa alerta Amber se anule, la FJG-CDMX aún la tiene activa, lo que habla de que en la fiscalía capitalina no están al pendiente de su trabajo y responden a intereses donde la corrupción y el influyentismo están antes que hacer valer la justicia que exige la ciudadanía.