Cultura

Con presentación de obra sobre teatro náhuatl, rinden homenaje a Léon-Portilla

La obra póstuma Teatro náhuatl. Prehispánico, colonial y moderno fue presentada ayer en la FIL de Guadalajara. “Tenemos la fortuna de tener este libro hecho por Miguel”: Matos Moctezuma.

La obra póstuma Teatro náhuatl. Prehispánico, colonial y moderno fue presentada ayer en la FIL de Guadalajara. “Tenemos la fortuna de tener este libro hecho por Miguel”: Matos Moctezuma.

Con presentación de obra sobre teatro náhuatl, rinden homenaje a Léon-Portilla

Con presentación de obra sobre teatro náhuatl, rinden homenaje a Léon-Portilla

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Con la lectura de cuatro obras de teatro que Miguel León-Portilla (Ciudad de México, 1926-2019) tradujo del náhuatl al español, fue presentado ayer el libro Teatro náhuatl. Prehispánico, colonial y moderno, obra póstuma del filósofo y nahuatlato más importante del país durante el siglo XX y XXI.

En voz náhuatl de Victoriano de la Cruz y en español de Marina de Tavira, el público asistente a la 33 Feria Internacional del Libro de Guadalajara escuchó “La huida de Quetzacoatl”, “El abandono de Tula”, “Esperando a Godot (en náhuatl)” y “Coloquio y doctrina cristiana”.

El evento celebrado ayer como parte del Homenaje a Miguel León-Portilla organizado por El Colegio Nacional y la FIL Guadalajara, inició con la presencia de la viuda Ascension Treviño y Marisa León-Portilla, hija.

“Estamos reunidos por el cariño a un personaje inolvidable que es el doctor Miguel León-Portilla y qué mejor que esta noche hablar de su libro póstumo. Miguel León-Portilla era incansable, leía, escribía y daba conferencias, era un dinamo para producir obra. Tenemos la fortuna de tener este libro hecho por Miguel, quien contó, al igual que Sahagún, con ayudantes”, dijo el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma, Premio Crónica.

La obra editada por El Colegio Nacional es importante por varias razones, añadió.

“No sólo en sí mismo por tratar este aspecto del teatro náhuatl porque vemos cómo estas expresiones multitudinarias reunían a muchos protagonistas. Eso nos indica de la presencia del mundo náhuatl a través de algo importante: la palabra, que ha trascendido en tiempo y que nos llega ahora en forma de libro gracias a León-Portilla”, expresó.

El nahuatlato inició el libro con una comparación breve del teatro indígena con el teatro griego. “Me imagino que había alguien que guiaba y dispusiera cómo era la ceremonia y cómo se iba a llevar a cabo. Es impresionante que en algunos códices como el Borbónico vemos algunas danzas reunidas con representaciones”, indicó Matos Moctezuma.

En el apartado referente al periodo de colonización, el investigador emérito de la UNAM fallecido hace dos meses plasmó el enfrentamiento y la lucha con los españoles.

“Ellos (los españoles) ven de inmediato que los mexicas y otros grupos indígenas tienen representaciones masivas y aprovechan para traer las danzas de moros y cristianos que se convertirían en danzas de la conquista”, dijo.

Matos Moctezuma destacó que el libro incluye las obras “La conquista de Rodas” y “Jerusalén”. “En una de ellas ocurre algo muy curioso, el fraile les pide a los indígenas que ellos organicen la obra y entonces dividen de manera particular a los dos bandos: el cristianismo y al pagano. Ponen el virrey de México como quien comanda al bando indígena y a Cortés en el bando español”, dijo.

El arqueólogo mencionó que el libro incluye “La huida de Quetzacóatl”, en náhuatl, obra de León-Portilla escrita originalmente en español. “Una obra que presentamos y que a Miguel le llevó buen tiempo es indispensable conocerla, tenemos que leerla y gozarla. Consideró que Miguel siempre fue muy rebelde, es decir, que en 1956 cuando se graduó, publicó su Filosofía náhuatl en donde planteó que los indígenas tienen una forma de pensamiento particular, después le dio voz a los vencidos y ahora tenemos un libro que reivindica estos elementos”, comentó.

En su participación, Luis de Tavira señaló que según León-Portilla la antigüedad del teatro en Mesoamérica es de casi un milenio. “De entre los textos de la antigua palabra náhuatl compuestas para su escenificación sobresale la sobrevivencia de una recordación que aquí se incluye como ‘El abandono de Tula’ cuya posible escenificación aparece como la expresión teatral de un acontecimiento muchas veces recordado en la literatura náhuatl; esta obra y ‘La huida de Quetzacoatl’ como testimonio contemporáneo de la perduración de este acontecimiento mítico”.

El propio León-Portilla, esta vez como dramaturgo, compuso una tragedia moderna que ha titulado “La huida de Quetzacoatl” escrita en 1956 y que ha sido estrenada en diversas ocasiones en México y Francia y que también se incluye en el libro en castellano y en náhuatl, añadió.