Opinión

Consulta libre, previa e informada del tren maya

Consulta libre, previa e informada del tren maya

Consulta libre, previa e informada del tren maya

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Los pasados 29 y 30 de noviembre se llevaron a cabo las asambleas informativas sobre el proyecto de desarrollo regional Tren Maya en 15 comunidades indígenas donde se reunieron líderes y representantes de distintas localidades indígenas. Para tal efecto el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas que dirige Adelfo Regino, fue el órgano técnico encargado de llevar a cabo dicho proceso, mientras la Secretaria de Gobernación fungió como órgano garante y FONATUR como la institución encargada del proyecto obligada a informar. Al respecto cabe destacar que dicho proceso se hizo con la observación de funcionarios tanto de la ONU como de la CNDH.

Como nunca antes las comunidades indígenas de la península están siendo participes, consideradas, informadas y consultadas para un proyecto de desarrollo de las dimensiones del Tren Maya y la información es dada con la presencia en territorio de representantes de casi todas las dependencias del Gobierno de México.

Aunado a lo anterior durante las asambleas informativas la gente tuvo oportunidad de contar con traducción a las lenguas indígenas de cada localidad y los funcionarios durante todo el proceso de las asambleas daban respuesta a las preguntas de la gente. Al respecto cabe destacar que gran parte de las inquietudes iban encaminadas a la solución de problemas añejos que las administraciones pasadas ni siquiera se enteraron que existían, y que ahora los indígenas de la zona conviven con funcionarios gobernando a “ras de tierra”.

Tras las mencionadas asambleas se estableció un tiempo deliberativo para que las autoridades indígenas pudieran transmitir la información en sus comunidades para que el próximo 14 y 15 de diciembre la gente pueda manifestar libremente su voluntad durante la consulta. Esto será un momento de suma relevancia para la Península de Yucatán para la implementación de un proyecto estratégico que desde un principio está siendo construido con la amplia participación de todas las voces, pero sobre todo con un sector de la población que durante décadas vivió en un total abandono por parte de los distintos gobiernos.

Si bien será muy interesante observar y analizar el desarrollo de dicho proceso, considero que en caso de contar con el consenso popular la próxima semana, esta obra constituirá un “antes” y un después” en la calidad de vida de la población de la península, tal como sostiene el secretario de Turismo Miguel Torruco Marqués en el libro El espíritu del Tren Maya: “esta región estratégica fue olvidada, maltratada y menospreciada y hoy nos toca iniciar un nuevo camino para abatir la pobreza y marginación, reducir las indignantes brechas de desigualdad existentes y resolver asuntos pendientes como el saneamiento de agua, el manejo adecuado de los residuos, el ordenamiento territorial sostenible, entre otras”. Con esto también se daría pie a poder atraer un turismo más consciente que vaya mucho más allá del “sol y playa”; es decir, un turismo de naturaleza comunitaria, rural, mística y alternativa que beneficie a la gente al interior de sus localidades promoviendo la conservación del medio ambiente, las tradiciones, las costumbres, la identidad cultural y espiritual y que mitigue la migración de los jóvenes.

Sinceramente espero que este proyecto logre contar con el respaldo social que requiere pues es una de las grandes apuestas del presidente Andrés Manuel López Obrador y representa una especie de retorno de Kulkulkán (serpiente emplumada) que desde tiempos ancestrales estaba predestinada para retornar el bienestar, la armonía y orgullo de uno de los pueblos más sabios del planeta, los mayas.

Twitter: @CesarG_Madruga
madrugacesardaniel@gmail.com