Una semana después del encuentro virtual entre docentes y personal académico de la Universidad del Bienestar Benito Juárez con sede en Calvillo, Aguascalientes, (8 septiembre) con la directora de este proyecto de Educación Superior, Raquel Sosa Elízaga, para encontrar una solución a las acciones ilegales que de manera autoritaria y unilateral ella está cometiendo al recurrir a pretextos absurdos sin argumento lógico ni justificación para reducir el salario de los profesores, y al ser ignoradas las solicitudes de más personal docente para esta escuela, así como reclamar el despido de personal de las distintos planteles de la universidad, este 15 de septiembre, docentes de la universidad en Calvillo publicaron un manifiesto en el que exigen respeto a sus contratos laborales, y aunque seguirán trabajando bajo protesta, piden al gobierno federal se detengan las arbitrariedades cometidas por Sosa Elízaga, se frene el oustsourcing simulado que existe con los polémicos convenios de trabajo y se proceda a dar legalidad a los contratos laborales y a las prestaciones de ley.

Unidos en una sola voz y con el clamor de ¡Unámonos No más Despidos!, docentes de tiempo completo de la sede Calvillo de la UBBJG reiteraron nuevamente al gobierno federal atender la situación que se vive en los 145 planteles de la universidad y no dejar que este noble proyecto educativo se encamine a su extinción cuando apenas se están colocando los primeros cimientos, toda vez que los caprichos de una persona (Raquel Sosa) están acabando con el proyecto educativo que con tanto esfuerzo se está creando.

Los docentes firmantes del manifiesto, Dr. Salvador Martín Medina Torres, LH LCA. Marco Antonio Meza Pérez, Dr. Xicoténtactl López Andrade, MC. Miguel Ángel Muñiz Torres, instaron a los coordinadores y docentes de las otras 144 sedes de la UBBJ a sumarse para exigir respeto a sus derechos laborales y dignidad docente, trabajar bajo protesta y abandonar el miedo.

INFRUCTUOSA REUNIÓN.

Al ser ignorados sus reclamos tras una infructuosa reunión virtual con Raquel Sosa, quien no ofreció ninguna solución y tampoco abrió la puerta a buscar soluciones, los profesores y personal académico inconformes con el trato que se le ha dado a sus demandas laborales, exigen en su manifiesto que el gobierno federal vea de primera mano lo que ocurre con la UBBJ y la manipulación y amagos que existe contra todo el personal, lo que incluso ya está afectando la enseñanza de los estudiantes, al grado de que existe incertidumbre sobre el registro de nuevos alumnos y sobre la terminación de carrera y quienes están en el último escalón de sus estudios.

Los docentes exigen trato digno, cese inmediato de las acciones autoritarias, irrespetuosas y groseras por parte de Raquel Sosa y aclaran que este reclamo a sus derechos laborales no son un atentado con afán destructivo contra la universidad como argumenta la directora de la UBBJ, en su intención de desviar la atención de los reclamos que trata de ignorar.

CESE INMEDIATO DE ARBITRARIEDADES.

Asimismo, exigen que cesen de inmediato los despidos ilegales del personal de la universidad y se les reinstale y se les reconozca su relación laboral, y que en caso de amagos, suspensión de labores y descuentos salariales arbitrarios las protestas llegarán hasta el presidente de la República.

En la misiva se demanda que los contratos laborales sean conforme a la ley y no mediante los polémicos convenios que son una forma de outsourcing simulado, se les dé de alta en el IMSS, se les otorguen las prestaciones de ley y se les reconozca la antigüedad laboral, y se les reconozcan 40 horas laborales como tiempo completo.

Destacan también que se deben cancelar de inmediato los convenios u outsourcing simulado que existe, toda vez que el esquema de subsidio para el programa de las UBBJ, no exime al Organismo Coordinador de las Universidades para el Bienestar Benito Juárez García (OCuBBJ) de cumplir la Ley y reconocer la relación laboral del personal docente y de apoyo de la universidad, contratándolos con las prestaciones que corresponden y la reinstalación inmediata de todos los docentes y personal académico despedidos.

En el mismo tenor, exigen respeto a las diferencias de opinión o preferencia ideológica a todos los niveles, desde la dirección general hasta trabajadores de apoyo sin distinción.

El manifiesto busca que el gobierno federal tome cartas en el asunto y resuelva pronto la situación, antes de que esta crisis crezca y ponga en una situación más difícil lo que aqueja a este noble proyecto educativo.