Automovilistas hicieron ayer, desde temprano, largas filas en gasolineras de la Ciudad en búsqueda de abastecer de combustible sus vehículos.

Y durante la mayor parte del día se observó a gente desesperada, leyendo, charlando… y hasta haciendo un picnic.

En la estación de la Calle Zacatecas, esquina con Cuauhtémoc, se observa la fila de vehículos sobre la avenida aunque no hay servicio debido al desabasto.

En tanto, usuarios en redes reportaron prolongados tiempos de espera y estaciones cerradas.

“El gobierno dijo que no hay desabasto en la CDMX, pero hoy pasé por 3 gasolineras que no tenían Premium, dos estaban cerradas por falta de gasolina y 4 con filas de al menos una hora”.

En Iztapalapa el panorama no ha cambiado: filas de más de un kilómetro desde las 06:00 de la mañana, por lo que se observó a personas durmiendo en sus vehículos, puesto que se desmañanaron para tratar de cargar combustible.

Hubo conductores que cargaron con toda la familia, “pues no sé cuánto tiempo tarde y es el único día que descanso y puedo convivir con ellos”, comentó Román Linares.

En la batea de su camioneta, un pollo rostizado y una cocacola familiar bien fría fueron el desayuno para seis personas, incluida su suegra en silla de ruedas, que los acompañó.

La tarde pasó entre charlas de inseguridad y la estrategia de acabar con el huachicoleo de Andrés Manuel López Obrador. “Eso nunca se terminará, el pueblo es bien cabrón”, le dijo Damián Sotelo a su recién conocido amigo José, mientras esperaban a que avanzara la fila.

Así se fue el día, entre garrafones y vehículos esperando. Con la esperanza de que en la semana se normalice el abasto.