Este viernes llamó la atención que las autoridades de salud del país (federales y estatales) fueran incapaces de presentar el mapeo de riesgos de cada semana, pero esto no fue abordado por el subsecretario durante su exposición normal, sino que lo abordó a pregunta expresa:

“Sigue vigente el de la semana pasada, acaba el lunes”, dijo y reiteró que se están revisando los datos que enviaron las entidades federativas y las inconsistencias que mostraron. “Ojalá que mañana ya tengamos claridad y que podamos liberar el semáforo”, indicó y agregó que de no ser así, será el lunes. Mientras no se presente el nuevo, sigue vigente el anterior, indicó un subsecretario visiblemente cansado.

López Gatell se dio tiempo de mencionar que sus presentaciones no equivalen a calificar a las acciones de contención que se han tomado.

Es corresponsabilidad, indicó refiriéndose al papel de los ciudadanos, sean empledos, pequeños empresarios o cualquier otro, “toda la humanidad está afectada por la pandemia del COVID; toda la humanidad está en posibilidades de participar”, señaló y dijo que muchas veces se buscan culpables “en una actitud poco productiva”. Reiteró que no sirve de nada que haya instrucciones de gobierno si la población en general no participa, “todos somos parte de esto”.

El subsecretario de Salud federal ya está hablando desde hace días de los 50 mil pacientes contagiosos, que parece ser el techo real entre quienes han sido sometidos a pruebas COVID, aunque reiteró su confianza en que hay un proceso de desaceleración de la pandemia en nuestro país. Se informó finalmente que estamos al borde los 35 mil decesos COVID.

SEÑALA QUE NUEVAS UNIDADES DE CUIDADOS INTENSIVOS INFORMAN COMO CAMAS HOSPITALARIAS NORMALES. Hace un par de días, a partir de datos oficiales de la secretaría de Salud, Crónica informó que 69 por ciento de los pacientes que murieron por COVID no pisaron unidades de cuidados intensivos. Este sábado, después de retrasar una respuesta a este tema durante 48 horas, el subsecretario Hugo López Gatell señaló que la razón de esto es que las unidades de cuidados intensivos emergentes, aquellas de reciente instalación como respuesta a la llegada del COVID a México, informan sus datos como camas hospitalarias normales.

Sin explicar cómo había ordenado a los sistemas hospitalarios de las 32 entidades que incurrieran simultáneamente en esta inconsistencia al informar sus datos (pues sus informes quedaron registrados como camas normales de hospital), ni cuál es el dato real de atención en cuidados intensivos de quienes murieron por el coronavirus, el subsecretario intercaló la respuesta a mitad de su información.

El propio secretario refirió que este tipo de unidades no sólo son camas y ventiladores, sino personal capacitado y protocolos de atención al paciente. Del por qué se hizo (según su dicho) que las unidades de cuidados intensivos nuevas no reportaran como tal, no hubo señalamiento alguno.

Como se recordará, Crónica informó que en las conferencias, noche a noche, López Gatell y sus colaboradores no hablan de que más 21 mil personas han fallecido sin pisar las Unidades de Cuidados Intensivos habilitadas para tratar el COVID.

El gobierno se afanó en crear una infraestructura especial para atender coronavirus, acaparando 3 de cada 10 instalaciones hospitalarias, lo que significó descuidar a otros enfermos. Todo está registrado en las bases de datos públicas de la Secretaría de Salud, consultable en su web.