Opinión

El arma secreta

El arma secreta

El arma secreta

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Ya que la Fiscalía anda enderezando los entuertos morenistas en el país, Mario Delgado demandó que también se vaya contra Francisco Pelayo, el candidato aliancista en BCS, que desbancó en las encuestas al abanderado de Morena, Víctor Manuel Castro.

El dirigente nacional de Morena se dio una vuelta por Los Cabos para intentar reanimar la campaña de su partido que ha perdido aire y está cada vez más lejos del puntero, que causalmente es Pelayo.

Si el presidente ya dijo, sin sonrojarse, que claro que se mete en la elección y que desde luego usa a las instituciones para acorralar rivales, pues Mario Delgado quiere que se meta más y que también tire a Pelayo, o por lo menos que le amargue la existencia.

La Fiscalía es el arma secreta para que los candidatos de Morena que se retrasan en los sondeos, repunten.

Debate sin Torita

Evelyn Salgado, “La Torita”, anunció que no participará en el debate entre candidatos a la gubernatura de Guerrero.

La decisión, aconsejada por su padre, quiere blindar a la candidata que tiene cero experiencia política. Sus rivales podrían hacerla tropezar.

Contra lo que pudiera pensarse no se trató de una decisión unánime al interior de Morena pues la ausencia del partido en el anterior debate fue aprovechada por sus rivales, sobre todo por Mario Moreno de la alianza PRI-PRD.

Los argumentos de Evelyn para faltar al debate son endebles. Dijo que las propuestas se las hace a la gente sin intermediarios. Lo cierto, dicen allá, es que no está lista para responder cuestionamientos sobre temas escabrosos, como el de su suegro detenido por lavar dinero del Cartel de Sinaloa.

De modo que seguirá sus recorridos. El equipo de Morena la blindará para que no interactúe ni con reporteros ni con adversarios y solo les dedique tiempo a los fotógrafos.

Empate técnico

Al iniciar el año, las encuestas de preferencias electorales en Tlaxcala daban a Morena una cómoda ventaja de 2 a 1 sobre sus rivales.

Igual y la candidata de Morena, Lorena Cuéllar y su equipo se la creyeron. Se tumbaron en la hamaca esperando la jornada electoral para alzarse con la victoria.

Pero pasaron los días y hoy, a tres semanas de los comicios, ya la alcanzó su rival aliancista Anabel Ávalos.

Lo que se dice allá es que la figura clave de los próximos días podría ser Juan Carlos Sánchez, de Redes Sociales Progresistas, que tiene casi un diez por ciento de las preferencias y que está siendo tentado para un operativo de voto útil.

¿Cuál de las dos candidatas logrará atraerlo? La versión es que el caso llegó ya a las dirigencias nacionales de los partidos involucrados, pues será una elección cerradísima en la que un puñado de votos hará la diferencia.

Todos con tarjeta

La oferta de entregar tarjetas de ayuda económica como gancho electoral es una mala costumbre extendida entre los políticos en campaña.

Políticos de todos los partidos lo hacen. Es un recurso sencillo para quedar bien. La población mayoritaria siempre anda a la última pregunta y cualquier propuesta de ayuda, en especie o en efectivo, es bienvenida.

La Fiscalía le ha puesto el ojo al candidato del PRI la gubernatura de Nuevo León, - que por cierto reparte tarjetas de cartón que no tienen dinero- pero otros candidatos como los morenistas Carlos Lomelí y Clara Luz Flores también han ofrecido tarjetas para atraer a los votantes.

Pero ellos están fuera del radar de las autoridades que sólo tienen en la mira a quienes consideran sus enemigos. Con los otros se hacen de la vista gorda.

El ejercicio discrecional de la justicia no terminará con la mala costumbre de las tarjetas de ayuda económica, sólo ajustará cuentas con adversarios incómodos cuyas campañas se busca descarrilar.