El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) reduciría en 90 por ciento su presupuesto para investigación al aplicar los recortes que ordenó el presidente Andrés Manuel López Obrador el pasado 23 de abril. Esto significa que los 155 millones de pesos asignados, disminuirían a 15 millones distribuidos en proyectos que no generen gastos como guiones museográficos o redacción de libros sin posibilidad de publicarse este año.

Así lo expresaron representantes del Sindicato Nacional de Profesores de Investigación científica y Docencia del INAH (SNPICD-INAH), quienes entregaron una carta al Presidente para solicitarle que reconsidere el recorte del 75 por ciento al presupuesto del INAH.

SIN RECURSOS. “El recorte ya se ordenó, ya se está haciendo, pero los resultados se verán hasta varios meses después", señaló el arqueólogo Gustavo Ramírez Castilla.

En el caso de los proyectos de investigación, externó, anualmente se autorizan entre mil 500 y mil 800 de todas las áreas: arquitectura, restauración, antropología, historia, arqueología y lingüística; pero hasta el momento se han autorizado 178 y se les dará visto bueno a aquellos que no generen gastos.

“Para este año, con el recorte presupuestal, sólo se están autorizando aquellos proyectos que no implican un presupuesto, que pueden ser la elaboración de un guion museográfico, una exposición fotográfica, la redacción de un libro y todo lo que no implica gastar en salidas a campo o contratación de personal”, indicó.

El arqueólogo detalló que el INAH prevé la contratación de investigadores eventuales —capítulo 3000—. “De éstos se aprobarán algunos proyectos, no sabemos cuántos, pero sí sabemos que implica la contratación de 777 investigadores eventuales”, dijo Ramírez Castilla.

Lo anterior porque la instrucción presidencial fue respetar a profesionales con un contrato previo a la pandemia. “Esos proyectos se autorizarán, es decir, no se aprobarán en virtud de las cualidades del proyecto mismo, sino de esa condición”.

El resto de los proyectos están congelados, señaló el arqueólogo. “Ya nos dijeron que no van a salir; actualmente hay 15 millones de pesos disponibles para proyectos de investigación y aún no se establece la norma para brindar ese aporte que es insignificante para una institución de nivel nacional”.

Ramírez Castilla detalló que los 155 millones de pesos destinados este 2020 a proyectos de investigación, se aplicó un primer recorte del 42 por ciento, después otra reducción de 30 millones, quedando 62 millones de pesos, de los cuales, la mitad ya estaban destinados para el pago del personal contratado en enero y a quienes aún se les adeuda el pago.

“Quedaron 31 millones de pesos y con la instrucción del presidente de mantener al personal con contrato, el director general (Diego Prieto) dispuso que unos 15 millones de pesos se destinaran a pagar contrataciones de personal que estaría integrado a 178 proyectos de julio a diciembre”, señaló.

Entonces, añadió, restan 15 millones y medio de pesos que se deberán repartir en los 60 centros de trabajo del INAH, además de zonas arqueológicas y monumentos históricos. “Eso no alcanza para hacer una investigación de calidad ni de impacto, esperamos que esa situación no se prolongue en el año que viene”.

Aunado a ello, la Comisión Central de Publicaciones del INAH informó a los investigadores que este año las publicaciones no podrán imprimirse.

PETICIÓN.El documento que los investigadores entregaron el pasado lunes al presidente, mediante la oficina de atención ciudadana, pide que Presidencia y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) reconozcan al INAH como una institución de investigación científica básica y aplicada y, por tanto, reciba el mismo trato que los centros Conacyt para no afectar su presupuesto.

Además de argumentar que el recorte del 75 por ciento de su presupuesto en gastos de operación pone al instituto “al borde de la parálisis e incumplimiento de su objeto social”, la carta enfatiza en cuatro razones y una de ellas es que el INAH contribuye al Producto Interno Bruto (PIB).

“El INAH maneja 194 zonas arqueológicas, 162 museos y 515 monumentos históricos que se traducen en el 8.7 por ciento del PIB (cifras de 2018), es decir mil 221 billones de pesos, de los cuales el Instituto sólo recibió para el 2019, tres mil 900 millones de pesos”, destaca.

Otro punto es que el INAH realiza peritajes para la resolución de litigios sobre diversa índole: disputas territoriales, juicios penales, de violencia de género, discriminación, y rescates y salvamentos arqueológicos que deben realizarse antes de la ejecución de las obras públicas e incluso privadas.

Por último, los investigadores señalan que el instituto tiene tres escuelas que operan “precariamente porque no cuentan con instalaciones e infraestructura adecuada”. También evidencian que los profesores contratados por hora-semana-mes perciben sueldos de mil 280 pesos al mes y a quienes la prohibición de contrataciones los podría colocar en el desempleo.

En conferencia de prensa, los expertos señalaron que iniciarán una campaña de información sobre las tareas del INAH durante tres meses, mediante videos que difundirán en redes sociales.