Escenario

Falleció El Rebelde del Acordeón

El cantante y acordeonista Celso Piña perdió la vida a los 66 años, víctima de un infarto, en su natal Monterrey

El cantante y acordeonista Celso Piña perdió la vida a los 66 años, víctima de un infarto, en su natal Monterrey

Falleció El Rebelde del Acordeón

Falleció El Rebelde del Acordeón

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

"No hay quien se resista a la cumbia”, escribió la mañana de ayer el icónico cantante y acordeonista Celso Piña en su cuenta de Twitter, acompañado de un video donde aparece tocando junto a Pato Machete (La Maldita Vecindad) su tema más icónico “La cumbia sobre el río”.

Ése fue su último mensaje en redes sociales. “Luna llena mi alma de cumbia, saca de mí la locura, llévame a la luz y a la paz”, reza la letra del tema que desde ayer suena en todos los rincones del país en honor a su creador, debido a que perdió la vida ayer a las 12:38 horas, tras sufrir un infarto en Monterrey, Nuevo León.

El cantante, quien tenía 66 años de edad, fue internado de emergencia en el hospital San Vicente y murió momentos después. La primera que dio a conocer la noticia fue su sobrina Bety Piña y el hecho fue confirmado más tarde por su hija, Cecilia Piña Ortiz:

“Papá te amo con todo mi corazón, fuiste y serás siempre el mejor del mundo” con estas emotivas palabras es como Cecilia Peña, se despidió de su padre, en un mensaje escrito en su cuenta de Facebook. “El cielo ya está de fiesta”, añadió.

Nacido en Monterrey el 6 de abril de 1953, Celso Piña dedicó toda su vida a llevar la cumbia mexicana a todos los rincones del país y a otros alrededor del mundo. En el medio artístico se le reconoce por su capacidad de fusionar la cumbia con otros géneros que van de los sonideros y tropicales al hip hop, rock y pop, sólo por mencionar algunos.

Celso Piña empezó tocando música regional acompañado de sus hermanos Eduardo, Rubén y Enrique; juntos daban serenatas en el barrio a todas las chicas de la cuadra. Fue en 1980 cuando Celso compró su primer acordeón para introducirse al mundo de la música vallenata, con largas horas de ensayo y esfuerzo, en la popular colonia Independencia, al sur de la ciudad de Monterrey.

Para esta zona donde vivió mucho tiempo tiene una cumbia llamada “Mi colonia Independencia”, que se ubica en la populosa zona del Cerro de la Campana en Monterrey.  En la década de los 80 formó Celso Piña y su Ronda Bogotá, banda con la que lanzó sus primeros temas como “La cumbia de la paz”, “Como el viento” y una versión de “La piragua”.

Su discografía incluye 27 álbumes, siendo el último Música es Música con la Orquesta de Baja California (2017). El músico fue nominado a dos Latin Grammy y se dio a conocer ante un público más joven gracias a los diversos álbumes que grabó acompañado por luminarias como Lila Downs, Cartel de Santa, Control Machete, El Gran Silencio y Natalia Lafourcade.

Uno de sus últimos sueños cumplidos fue el de llevar su cumbia al Reino Unido, como parte de La Línea The London Latin Music Festival que se realizó entre abril y mayo. Un hecho que tardó años, “En una ocasión que íbamos a ir, nos dijeron que teníamos que dormir en el evento, que porque los hoteles estaban caros y tampoco se vale eso. Nos deben dar nuestro lugar, es una falta de respeto que nos quieran ningunear o que nos vean como limosneros”, sentenció.

“Yo ya fui a China, Marruecos, toda Europa, Centro y Sudamérica, y muchos no pasan de Estados Unidos a México. Para mí es aleccionador y constructivo viajar y llevar mi música”, comentó.

La última ocasión en que El Rebelde del Acordeón se presentó en vivo fue el 4 de julio, como parte del Surf Music Fest 2019, que se llevó a cabo en Acapulco: “Yo le debo mucho a la cumbia, en los 70 empecé a interpretar cumbia y mucha gente decía que era una música muy corriente, pero la bailan”, dijo antes de esa presentación.

“La gente es muy ingrata, necesita que alguien venga y le abra los ojos; yo estaba vetado en Monterrey, porque donde yo iba a tocar se hacían broncas, así estuve batallando, me decía que jalaba puro mariguano y puro lesbiano, todo cambió hasta que le toqué a mi amigo García Márquez y desde ahí la gente amó la cumbia”, añadió.

La vez que hizo bailar a Gabriel García Márquez fue en el 2003, cuando estaban en el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (Marco): “¡Empezó a bailar!, fue muy loable porque me llamó la atención que le gustó lo mío, todo su séquito se puso a bailar primero con la ‘Cumbia Sampoesana’, su preferida”, dijo a la revista Proceso.

El músico y el escritor se volvieron a encontrar otras veces e incluso Piña se inspiró en la obra de Márquez. En 2014, Celso llevó por primera vez su música a España con un disco que incluía temas dedicados al colombiano, a quien además ofrendó la presentación de esta producción, el 17 de mayo de ese año, en El Plaza Condesa.