El hacinamiento y la falta de una vivienda digna mayor a 40 metros cuadrados, agrava el impacto del Covid sobre todo en los sectores y familias de escasos recursos quienes aumentan el riesgo de contagios al habitar literalmente en uno o dos cuartos habilitados como vivienda, muchas veces sin servicios básicos.

Así lo advirtió, Oscar Munguía, Dirigente de la Asamblea de Barrios de la Ciudad de México, Grupo Miguel Hidalgo, y explica que el 52 por ciento de los capitalinos viven en situación de pobreza y su principal carencia es la vivienda digna, lo que ha magnificado el impacto de la pandemia en ese sector de la población, sobre todo –dijo--en aquellas personas que viven en lugares poco salubres y dignos, sin servicios básicos y adecuados para garantizar la sana distancia y evitar el contagio intrafamiliar.

“Se dice que la vivienda es la primera línea de protección frente a la pandemia, pero hoy familias enteras están muriendo por no contar con un espacio propio, mayor a 40 metros cuadrados y con servicios básicos tales como, agua, luz y drenaje”, advierte

El también dirigente perredista afirma que la vivienda es un derecho protegido constitucionalmente, sin embargo, esta potestad ahora solo forma parte de un mercado inaccesible para millones de mexicanos que apenas ganan uno o dos salarios mínimos-

La crisis sanitaria afecta mayormente a la población vulnerable de México, tan solo el 71 por ciento de las personas fallecidas vivían en condiciones de pobreza, esto de acuerdo a datos arrojados por el estudio de “Mortalidad por COVID-19 en México” publicado por la UNAM.

El dirigente asevera que la vivienda es fundamental para el cumplimiento de otros derechos, así como, para combatir la desigualdad, la exclusión y la pobreza.

“Basta de palabras, necesitamos hechos, crear soluciones en conjunto, no queremos limosna, queremos unir esfuerzos para hacer realidad el derecho de una vivienda digna y decorosa para las familias. Es momento de llevar nuestra voz y lucha a donde se hacen las leyes” , demandó