La tercera ola de Covid irrumpe con toda su fuerza en la vida de los mexicanos. Toca la puerta de los mexicanos siempre acompañado de la incertidumbre, la angustia y el miedo que provoca el poder perder a un ser querido, sumado a la impotencia de sentir que no se hace lo suficiente para sacarlo adelante pues contagiarse de esa enfermedad ya atenderlo en casa sale caro: desde 16 mil pesos hasta unos 50 mil pesos en promedio dependiendo de la gravedad y medicamentos que requiera el o los pacientes, pues muchas veces son familias enteras las que caen en esta emergencia.

Hijos que hospitalizaron a sus padres y no los volvieron a ver vivos, sin tener la oportunidad de despedirse de ellos; mujeres que enviudan, familias desintegradas, hijos que de manera súbita pasan a la orfandad.

Con más de 145 mil contagios activos en los últimos 14 días, la variante Delta acredita que la tercera ola ha resultado ser más contagiosa que las primeras y la gran mayoría de la población no está preparada para los gastos económicos que implican enfermarse por Covid y menos si pretenden atenderse en casa y evitar el Hospital

Atender a un enfermo de Covid-19 en casa llega a costar 6,150 pesos por semana, según un monitoreo de precios de lo que cuesta atender un paciente de este tipo en el hogar realizado por la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC).

Eso sin contar que los concentradores de oxígeno pueden incrementar hasta en un 25% el recibo de la luz de los hogares mexicanos.

En esta tercera ola, hay que tomar en cuenta que en un hospital asequible se deberán pagar entre $25 y hasta $50 mil pesos por día de hospitalización.

Para los ciudadanos de carne y hueso el rostro de la pandemia no es un tema estadístico ni mucho menos de discusiones estériles sobre si usar o no el cubrebocas. Para ellos, el significado de la pandemia son pérdidas humanas concretas, de cercanos, con nombre y apellido que infringen un vacío afectivo y emocional difícil de superar. No habrá luto que amaine su dolor.

“Que se diga que la variante Delta enfermará, pero no matará es una verdadera grosería, así como también lo es pensar que los padres de familia no están interesados en que sus hijos vuelvan a clases; quiénes, si no ellos, son los más interesados en que esto suceda, el problema es que las escuelas no se encuentran en condiciones de permitirlo y menos aún ahora cuando la pandemia está a todo lo que da.

En esto, como en todo, lo que debe privar es el sentido común, los padres de familia no jugarán a la ruleta rusa la salud y vida de sus hijos. Si de verdad se quiere el regreso a clases se debería comenzar por rehabilitar las 230 mil escuelas públicas y programar gradualmente la vuelta a las aulas”, asegura, el dirigente nacional de la (ANPEC), Cuauhtémoc Rivera.

Que un miembro de una familia de cualquier estrato se enferme de Covid-19 significa un gasto extraordinario para el que regularmente la mayoría no está preparada.

A LA QUIEBRA

El gasto provocado por la enfermedad del Covid-19 no es una factura menor y menos cuando se llegan a enfermar varios miembros de la familia o la familia entera, como ocurre, lo que provoca la quiebra económica de las familias mexicanas.

El gasto promedio para quien se contagia de Covid en la actualidad y quiere atender en casa, asciende alrededor de 16 mil pesos semanales, según cifras de la ANPEC.

Estudios que incluyen pruebas de antígenos, toráxica, sanguínea, rayos X de Pulmón : 3. 700 pesos

Tanque de oxígeno 9500 L por día, 900 pesos, renta de concentrador; 1,800 pesos. Medicamentos que incluyen antibióticos, vitaminas, antiinflamatorios, 1.500, consulta médica, 1,000, materral anticovid, 750, cuidados de enfermera, 6, 500 pesos: un total de 16 mil pesos por la primera semana de contagio, de acuerdo a su monitoreo.

Eso sin contar con los anticoagulantes que llegan a incrementar el costo del tratamiento hasta en unos 4 o 5 mil pesos por semana.

Las hospitalizaciones han ascendido y los decesos no han dejado de sumar. La peligrosidad de la tercera ola reviste en la cercanía con el invierno, temporada de enfermedades respiratorias que, aunadas al Covid, perfilan un panorama por lo menos complicado para los mexicanos en los próximos meses.