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Inaugura la UNAM su Laboratorio Nacional de Observación de la Tierra

Instalación. El LANOT se ubica en el Instituto de Geografía y recibirá cada minuto imágenes satelitales de México. Se podrá observar los procesos de los mares, la atmósfera, las diferentes cubiertas vegetales y sus cambios en el corto, mediano y largo plazos

Instalación. El LANOT se ubica en el Instituto de Geografía y recibirá cada minuto imágenes satelitales de México. Se podrá observar los procesos de los mares, la atmósfera, las diferentes cubiertas vegetales y sus cambios en el corto, mediano y largo plazos

Inaugura la UNAM su Laboratorio Nacional de Observación de la Tierra

Inaugura la UNAM su Laboratorio Nacional de Observación de la Tierra

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) alberga un nuevo laboratorio nacional que recibirá imágenes satelitales de México cada minuto y permitirá contar con información en tiempo real de fenómenos climáticos extremos, emisiones de ceniza volcánica e incendios forestales.

Las nuevas instalaciones son parte de la red de Laboratorios Nacionales del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y sus herramientas y productos pueden ser usados por diferentes dependencias federales y universidades del país. El nombre de estas nuevas instalaciones es Laboratorio Nacional de Observación de la Tierra (Lanot) y estará localizado en el Instituto de Geografía.

La responsable de Estaciones Receptoras de Imágenes de la UNAM, Gabriela Gómez Rodríguez, dijo que el laboratorio trabajará estrechamente con la Secretaría de Marina, Conacyt y el INEGI.

OJOS EN EL CIELO. Los datos que se procesarán provienen de una red de decenas de satélites geoestacionarios, que son instrumentos que están a 36 mil kilómetros de altura sobre el nivel de la Tierra y van siguiendo el movimiento del planeta. Éstos están siempre sobre un punto del planeta, siguiendo la rotación, por eso son capaces de estar enviando imágenes constantes de un continente.

Debido a que la cantidad de información que capta un satélite es muy grande, antes se tardaba tres horas o más un envío de datos completos desde un satélite geoestacionario a una estación terrestre. Gracias al avance de la tecnología, ahora esta recepción de datos ocurre cada 15 minutos.

En el techo del laboratorio, localizado en Ciudad Universitaria, se cuenta con tres antenas; la primera de ellas parece una esfera pero al interior tiene una antena que se mueve 360 grados y es capaz de recibir información de los llamados satélites de órbita polar, que son la generación más antigua de satélites, recorren diferentes trayectorias y son manejados por la Administración Atmosférica y Oceanográfica de Estados Unidos (la NOOA, por sus siglas en inglés) y por la agencia espacial europea.

La segunda antena con la que se cuenta en el Lanot, es un plato de 4.3 metros de diámetro, que es la más novedosa del país porque es capaz de recibir información de la nueva generación de satélites meteorológicos conocida como GOES-16. Esta nueva generación de satélites genera tres veces más información de la que existía, obtiene imágenes de resolución de hasta 500 metros y envía imágenes del hemisferio occidental cada 15 minutos, y del hemisferio norte cada 5 minutos.

“En caso de que exista un evento meteorológico extraordinario, como un huracán, podemos recibir imágenes de regiones de México cada minuto”, indicó la maestra Gómez Rodríguez.

Finalmente, se tiene una antena más pequeña, llamada GEONET Cast,  que recibe información que se generó en diferentes estaciones terrestres de todo el continente y que llegan a la NOAA y desde ahí las puede captar México.

TERABYTES DE INFORMACIÓN. Manuel Suárez Lastra, director del Instituto de Geografía —en donde se ubica el LANOT—, explicó que diariamente reciben 2.7 teras de información, que se distribuyen en tiempo real a través de un geoportal, una página de internet, y se da acceso directo a sus servidores a dependencias que requieren estos datos.

Cada 15 minutos, agregó, se obtienen imágenes del Hemisferio Occidental completo; cada cinco minutos hay nueva información de toda Norteamérica y se puede dar seguimiento regional por minuto a huracanes, frentes fríos, incendios forestales, detección de tormentas eléctricas y eventos astronómicos como los eclipses o la actividad solar.

Además, recibe información del Solar Ultraviolet Imager, un telescopio que capta imágenes del Sol, lo que permite la emisión de alertas tempranas ante posibles impactos en la magnetósfera que provoquen interrupciones y/o daños en los sistemas de energía, comunicación y sistemas de navegación.

“Es factible observar los procesos de los mares, la atmósfera, las diferentes cubiertas vegetales y sus cambios en el corto, mediano y largo plazos; además, monitorear incendios, la actividad eruptiva, accidentes industriales de gran tamaño. Con esto es posible disminuir riesgos y prevenir desastres, incidiendo así en temas de seguridad nacional”, destacó.

En tanto, el coordinador del Lanot, Jorge Prado, indicó que éste forma parte de la Red Académica del Comité de Expertos de la Organización de las Naciones Unidas sobre el Manejo de Información Geoespacial Global, en la cual pueden brindar opiniones a los países sobre el uso de estos datos para atender asuntos de seguridad nacional y crecimiento económico.

El laboratorio, añadió, ayudará a vigilar el avance de las naciones en los compromisos de la Agenda 2030 en temas como el cambio climático y la reducción en la huella de carbono. “Se puede vigilar a partir de monitorear los cambios en la vegetación y usos de suelo. También podemos incidir en la seguridad alimentaria al evaluar cómo serán las cosechas anuales”.

Finalmente, Suárez Lastra aseguró que el Lanot, además de proporcionar información para la investigación científica y desarrollos tecnológicos, será un espacio para la docencia, pues en su labor se ha incorporado a becarios y estudiantes.