La fanciulla del West es una ópera actual y extremadamente significativa por el rol de la mujer. Minnie, quien da nombre a la obra, es inteligente, fuerte y diversa, ubicada en los años 1840 tardíos, señaló Marcello Mottadelli. Con la música de Giacomo Puccini (1954-1924) y libreto de Guelfo Civini (1873-1954) y Carlo Zangarini (1874-1943), la puesta en escena se presentará el 26 de septiembre, así como el 1, 3 y 6 de octubre en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.

“A diferencia de otras heroínas operísticas, aquí tenemos a una mujer empoderada, que tiene una capacidad de vivir y sobrevivir en medio de un mundo de aventureros, buscadores de oro, en pueblos desolados, donde ella es la dueña de la cantina y les plantea visiones de la vida a personas que son muy elementales y les ayuda a crecer. Siendo una mujer joven en un bar, además de darles whisky, los recibe y los hace ser una comunidad”, dijo, en entrevista con Crónica, Alonso Escalante, director artístico de la ópera de Bellas Artes.

Por otra parte, agregó el director concertador, Marcello Mottadelli, esta obra también tiene un ángulo moral importante, en que señala que todo el mundo merece una segunda oportunidad. El bandido ve, a partir del amor, una posibilidad de reencaminar su vida en otra dirección.

Esta puesta en escena estará protagonizada por la soprano estadunidense Elizabeth Blancke-Biggs, el bajo-barítono moldavo Roman Ialcic y el tenor mexicano Diego Torre. La fanciulla del West es el quinto título de la temporada 2019 de la Compañía Nacional de Ópera del INBAL.

La ópera está ubicada en los 1840 tardíos, explicó, en la época de la fiebre del oro, en una california recién anexada a los Estados Unidos, más Sergio Vela ha decidido no hacer un teatro propiamente naturalista, hay claras referencias a esta época y este espacio, como una propiedad que el vestuario mismo tiene. “La escenografía hace guiños a esta época pero de ninguna manera se trata de una ópera west”.

El movimiento escénico es donde más se explora, dando diferentes velocidades a los cantantes, haciendo una simulación de cámara lenta, donde está ocurriendo algo en lo que Sergio Vela quiere que el público enfoque su atención. “Hay un tratamiento muy que tiende más a la figuración abstracta que a la atracción misma”.

La música de la ópera de Giacomo Puccini es muy diferente de todas las demás por su influencia de Estados Unidos, explicó Marcello Mottadelli. “Es una música muy complicada, muy difícil de tocar para la orquesta, los solistas, el coro y por el maestro, porque para mí, las más complicadas óperas del repertorio italiano son: la última ópera de Giuseppe Verdi, ­Falstaff, y ésta”.

“La fanciulla del West es una pieza interesante porque hay momentos de grandes vivencias, interpretaciones y amor, cuyo sentimiento es como un rompecabezas de música. La cosa más difícil de encontrar es la línea continua, del inicio al final de la ópera, pero pienso que soy muy afortunado porque tengo una orquesta muy buena, un coro fantástico y los solistas son excepcionales. Estoy muy agradecido de compartir la música con todos porque la música es el arte por excelencia de la comunicación”.