Opinión

Las becas a estudiantes: ¿derecho constitucional?

Las becas a estudiantes: ¿derecho constitucional?

Las becas a estudiantes: ¿derecho constitucional?

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Nos enteramos por voz de Mario Delgado, líder de Morena en la Cámara de Diputados, que esa cámara se propone aprobar en un plazo corto una reforma al artículo 4º de la Constitución para consignar en ella, como derecho social fundamental, los programas de becas a estudiantes tal y como hasta hoy han existido.

Es preocupante esta iniciativa, porque esos programas apenas tienen un año de existencia y hasta ahora no se ha evaluado su verdadero impacto sobre la permanencia de los alumnos en la escuela y sobre el aprendizaje. Especialmente suscita dudas el programa de becas a alumnos de educación media superior dado que es un programa de beca universal —es decir, que se otorga a todos los alumnos—, que carece de precedentes en el país y vulnera el principio de equidad —que no equivale a igualdad— el cual postula no dar a todos lo mismo, sino dar más a quienes más lo necesitan y menos a los que menos necesitan.

No se ha evaluado ninguno de los actuales programas de becas, no obstante, existen investigaciones sobre las becas en educación media superior y su efecto sobre los alumnos, que deberían tomarse en cuenta. Una de estas investigaciones fue realizada, a solicitud de la SEP por el Banco Mundial y un análisis de sus resultados fue publicado en la revista Nexos de mayo de 2019 por Rafael de Hoyos.

Se evaluó el impacto del Programa de Becas para Educación Media Superior (800 mil becas) que se inició en 2007 y otorgaba beca a estudiantes bajo estos requisitos: a) que el estudiante proviniera de un hogar con ingresos por debajo de la línea de la pobreza —de acuerdo con información provista por el propio candidato y la definición de pobreza del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social— y b) que existiera suficiencia presupuestaria. Dadas estas dos condiciones, el alumno recibía una prestación de 800 pesos mensuales.

La investigación se apoyó en los resultados de la prueba Enlace de tercero de secundaria en 2009 y los resultados de la misma prueba en el año escolar 2012-2013. A la postre, la investigación llegó a estas conclusiones: “Los resultados muestran que ese programa de transferencias no fue efectivo para reducir el abandono escolar en México y —elemento quizá todavía más relevante— los resultados corroboran que una transferencia monetaria, sin un vínculo explícito al desempeño académico de los estudiantes, no fue capaz de mejorar los aprendizajes".De Hoyos, concluye: “La evidencia presentada aquí deja claro que si México está comprometido con el futuro de sus jóvenes preparatorianos, es necesario eliminar esquemas que asumen que es posible mejorar las oportunidades de vida de los jóvenes sin antes proveerles las competencias y habilidades necesarias para que transiten con éxito la preparatoria".

Estas conclusiones sugieren que es altamente probable que al menos el programa de becas para educación media superior sea una política fallida y que no sería recomendable adoptarla como una acción permanente del Estado. Los programas de becas deben ser evaluados y sólo a partir de los resultados que arrojen esas evaluaciones, se pueden emitir juicios sobre su valor para la permanencia y el aprendizaje. Tomar la decisión de incorporarlos a la Constitución como derechos sociales es, por lo menos, una iniciativa irresponsable.

Gilberto Guevara Niebla