El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas aprobó ayer jueves una resolución que rechaza las sanciones de Estados Unidos en contra del régimen de Venezuela. A su vez, el texto reafirma el “respeto a la soberanía” del pueblo venezolano y la “no intervención y no injerencia en los asuntos internos de los Estados”.

El documento fue presentado por Venezuela e Irán, y recibió el apoyo de  países como Rusia, Nicaragua, Uruguay y también México. “Definitivamente hemos perdido a México”, lamentó el presidente de Human ­Rights Watch, José Miguel Vivanco, en su cuenta de Twitter. “Está plagada de promesas vacías para evitar rendir cuentas”, dijo.

En esa misma resolución, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU pidió que Venezuela cumpla con las recomendaciones de la alta comisionada, Michelle Bachelet. El informe, presentado en julio por la Oficina de Derechos Humanos, instaba a Venezuela a poner fin al uso exclusivo de la fuerza, las ejecuciones extrajudiciales y la tortura.

La resolución fue aprobada por 18 votos a favor, 23 abstenciones y seis votos en contra. Entre los países que rechazaron la propuesta se encuentra Perú, Argentina o Brasil, que consideraron que el documento es demasiado laxo con el régimen de Nicolás Maduro y hará que su régimen no asuma ninguna responsabilidad por las violaciones de derechos humanos en su país.