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México carece de protocolo de acción para emergencias, como la actual: especialistas

No existe un proceso estandarizado para garantizar la continuidad de operaciones para el cumplimiento de funciones esenciales. Las secretarías de Economía y del Trabajo no han asumido un rol activo, critican.

No existe un proceso estandarizado para garantizar la continuidad de operaciones para el cumplimiento de funciones esenciales. Las secretarías de Economía y del Trabajo no han asumido un rol activo, critican.

México carece de protocolo de acción para emergencias, como la actual: especialistas

México carece de protocolo de acción para emergencias, como la actual: especialistas

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Empresas, organizaciones privadas y sociales del país carecen de un “plan de continuidad de operaciones en tiempos de contingencia”, como el solicitado por el gobierno federal para enfrentar la crisis del coronavirus.

“¿A qué plan se refieren? Yo sólo sé que debo comprar productos y venderlos, como lo he hecho hasta ahora, para así pagar a mis trabajadores y al SAT”, dice Édgar Genaro, dueño de una compañía dedicada a la comercialización de materias primas de origen químico.

No hay en México alguna normatividad, lineamiento, acuerdo o directriz oficial previa que contemple un protocolo de este tipo, vital para el funcionamiento económico en coyunturas como la actual y para aminorar el desempleo, señalaron a Crónica investigadores y expertos en la materia.

Desde la semana pasada, al aceptarse el inicio de la segunda fase de la pandemia en territorio mexicano, funcionarios federales han pedido a las entidades públicas, privadas y sociales “suspender las actividades laborales que impliquen la movilización o reunión de personas” y, a la vez, “activar sus planes de continuidad operativa para garantizar su misión y el derecho de usuarios, clientes y trabajadores”. Extendieron el alcance de esta disposición ayer, al declarar Emergencia Nacional por Causa de Fuerza Mayor.

“Pero ha sido bordar en el aire, porque a diferencia de otros países, en el nuestro no se ha profesionalizado un plan de acción para emergencias, y las secretarías de Economía y del Trabajo no han asumido un rol activo en el tema”, dice Isaac Lucatero, Director Regional en el Instituto de Emprendimiento Eugenio Garza Lagüera del Tecnológico de Monterrey.

Al establecerse las medidas preventivas para la mitigación y control de riesgos del COVID-19, se dispuso en el Diario Oficial de la Federación la instrumentación de “planes que garanticen la continuidad de operaciones para el cumplimiento de funciones esenciales”.

“No hay en México un proceso estandarizado al respecto ni una entidad de gobierno que esté fomentando la continuidad operativa de las empresas. Cada quien, por su lado, está implementando lo que desde su cancha es posible”, asegura José Enrique Alba, director regional Zona Emprendimiento del ITESM.

“En un plan estructurado tendría que participar el gobierno, los inversionistas y las universidades; un 70 por ciento de los lineamientos podrían ser comunes y homologables, pero un 30 por ciento depende del perfil de cada negocio o industria”.

Desde el gobierno, afirma, lo fundamental sería reducir el pago de impuestos o el pago de servicios, porque “eso automáticamente se va a las nóminas y detiene el desempleo; será más costoso desvincular y volver a contratar después, que tomar acciones ahora. Muchas empresas tienen caja para un mes, y si quieren sobrevivir la primera medida será desemplear”.

Desde las cámaras empresariales, el reto es la promoción de contactos con nuevos o diferentes clientes. Y desde la perspectiva de los propios inversionistas, acelerar cuentas por cobrar, adaptar el modelo de negocios hacia otros productos y novedosas plataformas virtuales de venta, aprovechar créditos con menor tasa, evitar grandes inversiones y buscar asociaciones con otras personas o compañías.

— ¿Qué preceptos debería contener hoy un plan de contingencia? —se le preguntó.

— Digitalizar todo, reducir la mayor cantidad de gastos operacionales que pueden ser reemplazados por temas digitales. El seguimiento a clientes, llamadas, contratos y pagos pueden solventarse desde lo digital.

— Pero los inversionistas pueden preguntarse, ¿cómo camino hacia la digitalización?

— Hay herramientas gratis que hoy existen y no se usan por desconocimiento, más de mil para autoempleos, Pymes, micro; es momento de trabajar de manera automatizada, con plataforma en línea. Por lo tanto, hay que capacitarse en transformación digital, hay cursos en la web de las universidades más prestigiadas del mundo y del país. Número uno, capacitarse; dos, aprovechar las herramientas digitales y 3, acoplar el modelo de negocios a la realidad actual. El 70 por ciento de la economía depende de los emprendedores y es importante cuidarlos.

En México, el INEGI tiene registradas en su último Directorio Nacional de Unidades Económicas 5 millones 80 mil empresas, de las cuales el 98 por ciento son pequeñas y micro…

“¿Qué hago con mis pedidos, con mis facturas?, ¿qué hago con los pagos pendientes, por hacer y por recibir?”, pregunta Joel Plata, dueño de una embotelladora de agua.

“En países como Estados Unidos, Canadá, Japón, Alemania y otros de Europa hay mayor sofisticación sobre cómo deben actuar las empresas en situaciones de riesgo, pero en México seguimos siendo muy artesanales”, apunta Lucatero.

— ¿Qué debe contemplar el inversionista?—se le cuestiona.

— Primero tener claro lo que vendrá: una disminución en la demanda que alargará el ciclo de ventas, incertidumbre en el corto y mediano plazo, dificultad para mantener los empleos, obligaciones fiscales y de pago, problemas en el suministro de productos, afectación en la producción y en las cuentas por cobrar, así como menor flujo de efectivo.

— Y en esa realidad, ¿qué debe incorporarse al plan de continuidad operativa?

— La reducción de gastos innecesarios o su posposición, líneas de comunicación directa con clientes y proveedores, alianza con clientes para asegurar cobranza y negociación, solidaridad de unos y otros: yo como cliente me pongo las pilas con los pagos, pero los proveedores igual, coordinación total con los equipos de trabajo: que todo el personal esté enterado de cuáles son los siguientes pasos en la empresa, ajustes en las estimaciones de venta, al menos para el siguiente trimestre, y en el esquema de producción, estrategias para asegurar liquidez a corto plazo, y medidas sanitarias y prácticas de higiene generalizadas.

— Pero al escuchar a los dueños de negocios o empresas, parece que están nadando entre cocodrilos con un vendaje en los ojos…

— Si no estaban listos, van a tener que estarlo, las crisis también nos lleva a profesionalizar métodos y a la transición digital. México y el mundo tendrán que cambiar sus protocolos empresariales de acción. En esta crisis, como en las anteriores, sólo subsistirán aquellos que logren acoplarse a las circunstancias adversas.

— Y hoy, ¿qué instituciones gubernamentales tendrían que liderar el esfuerzo y acompañar estas acciones?

— Las secretarías de Economía y del Trabajo, pero siempre en alianza con organismos gremiales y la academia…

LO QUE DICE LA LEY DEL TRABAJO SOBRE OBLIGACIONES DE LOS PATRONES.

XIX Bis. Cumplir con las disposiciones que en caso de emergencia sanitaria fije la autoridad competente, así como proporcionar a sus trabajadores los elementos que señale dicha autoridad, para prevenir enfermedades en caso de declaratoria de contingencia sanitaria.