Escenario

Muhammad Ali y los grandes boxeadores del cine

La vida de Ali no solo trascendió en el deporte sino que el séptimo arte también lo vio actuar e inspirar películas. Crónica revive su paso por la pantalla grande y la de otros grandes personajes del box

La vida de Ali no solo trascendió en el deporte sino que el séptimo arte también lo vio actuar e inspirar películas. Crónica revive su paso por la pantalla grande y la de otros grandes personajes del box

Muhammad Ali y los grandes boxeadores del cine

Muhammad Ali y los grandes boxeadores del cine

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy
El boxeo además de un deporte ha sido inspiración de diversas historias tanto en la literatura, la televisión, y desde luego el cine, donde se han proyectado diversos filmes con el pugilismo como temática principal. Desde las primeras décadas del cine personajes como Charles Chaplin y Buster Keaton comenzaron a tener los rings de boxeo como escenario para desarrollar historias del mundo del pugilismo, que vale la pena recordar luego de la reciente muerte de Muhammad Ali, quien también tuvo un breve paso por la pantalla grande y cuya carrera inspiró otros filmes.
Considerado el mejor boxeador de todos los tiempos en el año de 1977, tuvo la oportunidad de mostrar él mismo su historia en la pantalla al actuar y producir El más grande, un filme dirigido por Tom Gries y Monte Hellman. El filme muestra el proceso desde que nació en uno de los ambientes más marginales de la sociedad americana con el nombre de Cassius Clay hasta que alcanzó la cima del boxeo.
Otro filme destacado que inspiró Ali fue When We Were Kings (1996), un documental que revive al Estados Unidos de 1974, en el cual se vivía la resaca del Watergate y la dimisión de Nixon, el activismo negro y, sobre todo, los míticos combates de boxeo -especialmente el de Muhammad Ali contra George Foreman en el Zaire- en los que Ali, un hombre negro llegaría a ser un símbolo para su raza. Dirigido por Leon Coast la cinta ganó el Oscar al Mejor Documental.
El otro filme destacado sobre el boxeador fue Ali, un biopic dirigido por Michael Mann en el 2001, y el cual estuvo protagonizado por Will Smith, que alcanzó la nominación al Oscar al Mejor Actor. El filme hace un viaje a la historia de Ali desde sus orígenes hasta cuando se convirtió en uno de los personajes más entrañables de la historia contemporánea de los Estados Unidos.
Sin embargo, la obra que inspiró Ali también tiene otros títulos menos recordados entre los cuales destacan los documentales I am Ali (2014), dirigido por Clare Lewins; Facing Ali, de Pete McCormack; The trials of Muhammad Ali, de Bill Siegel y Thrilla in Manila sobre la última pelea entre Ali y Joe Frazier.
El pugilismo en el cine. El interés por mostrar las emociones del boxeo en el cine se remontan a los inicios del mismo cine, en 1891 era filmado el cortometraje Men Boxing de William K.L. Dickson y William Heise en los Laboratorios Edison de West Orange, Nueva Jersey, pero la producción no fue exhibida en público.
Las primeras grandes películas sobre el pugilismo llegaron de la mano de los grandes cineastas, primero Charles Chaplin se subió a un ring en la cinta The Champion (1915) y posteriormente el otro grande de la época Buster Keaton, hizo lo propio con Battling Butler (1926), sin embargo pocos saben que Alfred Hitchcock comenzó a experimentar el suspenso con la cinta The ring (1927) sobre la historia de un boxeador australiano que ocuklta su verdadera identidad.
En la década de los años 30, destacaron los filmes La Vía Lactea, de Leo McCarey (1936) y Kid Galahad, de Michael Curtiz (1937), mientras que en la década siguiente también hubo otros como El caballero audaz, de Raoul Walsh (1942), Cuerpo y alma, de Robert Rossen (1947), El ídolo de barro, de Mark Robson (1949) y Nadie puede vencerme, de Robert Wise (1949), que permitieron ver a actores como Errol Flynn, John Garfield y Kirk Douglas hacerla de memorables boxeadores.
En los años 50 también destacaron otras figuras por entrar al mundo del boxeo. De entrada el primer filme de Stanley Kubrick, llamado Day of the fight (1951), fue un cortometraje documental que narra la vida del boxeador irlandés Walter Cartier; posteriormente John Ford estrenó su grandiosa El hombre tranquilo (1952) con John Wayne como protagonista y Mark Robson volvió a este mundo con Más dura será la caída (1956) con Humphrey Bogart al frente del reparto. En el 56, también Paul Newman dio vida a un boxeador en Marcado por el odio, de Robert Wise.
Otra estrella que se puso los guantes de box fue Alain Delon en Rocco y sus hermanos, de Luchino Visconti (1960), así como Anthony Quinn en Réquiem para un luchador, de Ralph Nelson (1962), que llegó el mismo año que Kid Galahad, de Phil Karlson que tuvo como estrella a Elvis Presley como un prometedor boxeador.
Antes de la llegada del fenómeno de Rocky en los años 70 hubo otros filmes que destacaron en esa década. La primera en llegar fue La gran esperanza blanca, de Michael Ritt (1970), posteriormente Fat city, ciudad dorada, de John Huston (1972) con Stacy Keach y Jeff Bridges; y luego Hard times, de Walter Hill (1975) protagonizada por Charles Bronson. Posteriormente llegaron otras como Combate de fondo, de Howard Zieff (1979) y la conmovedora El campeón, de  Franco Zeffirelli (1979).
Sin embargo, el pugilismo en el cine no fue el mismo desde la llegada a las pantallas de Rocky, en 1976, una historia que se prolongó por décadas con un total de siete filmes de las cuales la última llegó apenas este año a México con Creed, la leyenda de Rocky, de Ryan Coogler. El aclamado personaje creado por Sylvester Stallone inspirado en el boxeador Rocky Marciano, uno de los grandes rivales de Muhammad Ali.
En los años 80 llegó otro personaje legendario en la pantalla grande con el estreno de Toro Salvaje (1980), de Martin Scorsese, con Robert De Niro en el papel de Jake LaMotta; destacaron también otros como Yo hice a Roque III, de Mariano Ozores (1980) y Homeboy, de Michael Seresin (1988) con Mickey Rourke como un autodestructivo peleador.
En los años 90 figuraron El golpe perfecto, de Michael Ritchie (1992); Corazón de campeón, de John Hamilton (1997); Boxer: Golpe a la vida, de Jim Sheridan (1997), con Daniel Day-Lewis; Hasta el último round, de Ron Shelton (1999), con Antonio Banderas en los guantes y Huracán Carter, de Norman Jewison (1999), con uno de los mejores trabajos de Denzel Washington.
Finalmente el nuevo milenio también ha traído grandes filmes como Girlfight, de Karyn Kusama (2000), con Michelle Rodríguez; La gran pelea, de Walter Hill (2002), con Wesley Snipes; Million Dollar Baby, de Clint Eastwood (2004) y un gran trabajo de Hilary Swank; Contra las cuerdas, de Charles S. Dutton (2004); El luchador, de Ron Howard (2005) con Russell Crowe como Cinderella Man y El último asalto, de Rod Lurie (2007).
Los últimos grandes filmes han sido The fighter, de David O. Russell (2010), con grandes actuaciones de Christian Bale y Mark Whalberg y Southpaw, de Antoine Fuqua (2015) con un papel destacado de Jake Gyllenhaal. Este año llegará a las salas el filme Manos de piedra, de Jonathan Jakubowicz (2016).