Opinión

Para la oreja

Para la oreja

Para la oreja

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Desde que el querido Manuel El Loco Valdés enfermó, ha estado yendo al hospital, donde nuevamente fue internado. Pese a que se mencionó que su última operación fue muy sencilla y le permitió abandonar el hospital de inmediato; nuevamente regresó porque se sentía mal y estaba deshidratado.

Sin embargo, su familia informó que se encuentra delicado de salud, por lo que deberán hacer otras radioterapias; y como siempre, hacemos cadena de oración por su pronta recuperación.

La situación económica del querido Loco Valdés tampoco es muy buena, ya que las últimas entrevistas que realizó antes de su ingreso al centro de salud, las cobró, cosa que algunos criticaron. Sin embargo, en su caso se me hace muy justo que quien quiera una exclusiva con él, la pague. Sabemos que lleva años su exclusividad en Televisa retenida por Hacienda. Además, tampoco ha podido cobrar su exclusividad que sigue resguardada por la empresa para la cual trabajó con mucho éxito. Insistimos en cadena de oración.

Algo que también nos extraña muchísimo es que nadie sabe, ni se puede comunicar, con el querido Príncipe de la Canción, José José, quién desde que se lo llevó su hija Sarita a Miami no ha visto a sus hijos José Joel y Marisol.

Incluso, cuando Marisol fue a verlo para darle la noticia de que sería abuelo, su media hermana no la dejo verlo. Laura, quien fue su brazo derecho en cuestiones de prensa por años y quién lo cuidó cuando estaba en el hospital de Nutrición en la Ciudad de México, tampoco pudo verlo. ¿Quién lo impide? Su hija Sarita. Ni sus grandes amigos han podido hablar con él. Por supuesto, esto hace pensar que lo tiene secuestrado.

Por ese motivo, hace unos días a través de sus redes sociales, mandó un mensaje de voz, donde asegura que su hija no lo tiene secuestrado, que al contrario, él está muy bien atendido por ella y que se está medicando para recuperarse favorablemente.

Lo que extraña es que en ocasiones pasadas, optó por mandar mensajes de video, pero en esta ocasión no lo hizo; además la voz evidencia que no se escucha del todo bien, al contrario, se oye peor que la última vez que mandó mensaje estando en la capital mexicana.

Sinceramente esperamos se encuentre como dice, pero el hecho de que su hija no permita que nadie lo vea no deja de ser extraño. Vamos a suponer que él así lo quiere, pero ¿no ver ni a sus otros hijos? No es normal, como tampoco lo es la poca información que se tiene de él, obtenida únicamente mediante supuestos paparazzi de una cadena de televisión.

Esto luego de que casualmente fuera fotografiado en el hospital en México, cuando estaba caminando con su hija Sarita, justo en el momento en que ésta mandó a Laura por un café, ya que no se despegaba de él. Por dichas razones se cree que es su hija quien ha vendido dicha información al canal. Sinceramente esperamos no sea verdad, pues resultaría terrible.