Con la llegada de Rodolfo Pizarro al Inter de Miami de la Major League Soccer (MLS), la liga en los Estados Unidos que nació tras el Mundial de 1994 por exigencia de la FIFA, es ahora un torneo competitivo, con un enorme marketing y con estrellas mexicanas, donde en 21 de los 24 equipos tienen mexicanos o algún jugador que pasó por la Liga MX.

En sus inicios, la MLS se caracterizó por traer a jugadores veteranos casi en el retiro como el español David Villa, el inglés Wayne Rooney y el mexicano Rafael Márquez, pero con gran inversión económica ha logrado llevar a elementos de gran calidad en su mejor momento futbolístico.

Con unos 40 millones de personas de origen mexicano en toda la Unión Americana, los futbolistas tricolores son un importante imán de taquilla y claves para elevar los raitings televisivos, fundamentales comercialmente en el mercado deportivo estadunidense.

La incorporación en el mercado invernal de Alan Pulido a Sporting Kansas City y Oswaldo Alanís al Heartquakes de San José, ambos procedentes de Chivas del Guadalajara, la llegada de Javier Hernández al Galaxy de Los Ángeles y Pizarro al Inter de Miami son los últimos ejemplos.

Pizarro, tras muchas negociaciones, salió del Monterrey por 19 millones de dólares, para emprender una aventura en Miami con una franquicia que debutará en la MLS, con la promesa de David Beckham de llevarlo después a Europa a través de sus contactos.

El elemento del Pachuca percibirá el doble de sueldo de lo que ganaba en Monterrey y será jugador franquicia de la institución.

El Chicharito Hernández luego de una década en Europa con Manchester United de la Premier League, Real Madrid, Bayern Leverkusen de la Bundesliga, su regreso al futbol inglés al West Ham y con muy poco juego en el Sevilla, llega al balompié de Estados Unidos, a la segunda ciudad con más mexicanos en el mundo, su playera ya se vende como pan caliente en Los Ángeles, y todavía no ha jugado ni un minuto.

Otro mexicano designado jugador franquicia es Carlos Vela de Los Ángeles FC, equipo al que llegó en 2018, tras 12 años Europa con Arsenal, West Bronwich, Celta, Salamanca, Osasuna y la Real Sociedad para convertirse en el máximo goleador de la MLS la temporada pasada.

Jonathan dos Santos cumplirá su tercera campaña con el Galaxy LA, en 66 encuentros ha marcado seis goles, durante su tiempo en Europa pasó por las inferiores y una breve estancia en el primer equipo del Barcelona y Villarreal.

Tras compartir el título de goleo individual en el Apertura 2019 de la Liga MX y tener cinco títulos en siete finales con Chivas, Alan Pulido determinó ir al Sporting Kansas City, donde intentará mantener su nivel de juego y cuota de goleo.

Otro futbolista procedente de Jalisco, Oswaldo Alanís que tras su paso por el Real Oviedo de la Segunda División en España, regresó a Chivas, donde fue relegado a la banca, por lo que prefirió reencontrarse con su ex técnico Matías Almeyda en los Earthquakes de San José.

En San José, juega Carlos Fierro, ex seleccionado nacional sub 17, quedó campeón en el Mundial de la categoría en México 2011, jugó en Chivas y Cruz Azul y ahora también es dirigido por el Pelado Almeyda, con el que jugó 9 partidos la temporada anterior.

Víctor Ulloa, de Cincinatti, fue transferido al Inter Miami como uno de los nuevos fichajes en medio de la expansión de la MLS. Para directiva y cuerpo técnico, el mexicoamericano está destinado a convertirse en el referente del mediocampo del cuadro de Florida, junto a Pizarro.

El arquero Pablo Sisniega con experiencia en divisiones menores del balompié europeo, vivirá su segunda temporada con el LAFC, compartiendo vestidor con Vela, en nueve partidos admitió 11 anotaciones y ahora buscará ser el portero titular.

Daniel Ríos, otro canterano de Chivas, es una de las apuestas de Nashville SC en su incorporación a la MLS, en la segunda división norteamericana (USL) disputó 66 partidos en los que anotó 40 goles y dio 5 asistencias.

Richard Sánchez pasó del Chicago Fire al Sporting Kansas City en noviembre del 2019, originario de Mission Hills pasó una etapa de su carrera futbolística en FC Dallas, antes de jugar para Tigres y una fugaz estancia en el Atlético de Madrid.

Efraín Álvarez, es mexicoamericano de 16 años, forma parte de la plantilla del Galaxy LA desde hace algunos meses, en la USL, el volante marcó 12 tantos en 18 partidos, ha sido llamado al equipo nacional mexicano Sub-17.

Julián Vázquez es un atacante de 18 años, otro mexicoamericano formado en las inferiores del Salt Lake, pasó brevemente por la ZBR Academy, es parte del primer equipo dirigido por Mike Petke, nació en Brigham City, Utah, está contemplado para integrar la Selección Mexicana Sub-18.