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Profepa y Sedena rescatan a 50 crías de pericos y loros en BC

Los ejemplares fueron abandonados en tres cajas de cartón antes de cruzar un retén de control en la carretera Sonoyta-San Luis Río Colorado. Son catalogados en “Peligro de Extinción”

Periquitos bebés en una caja
Periquitos bebés en una caja Periquitos bebés en una caja (La Crónica de Hoy)

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) rescataron 50 crías de pericos y loros que eran traficadas en Baja California.

Se trata de ocho ejemplares de loros Nuca Amarilla, 38 pericos Frente Naranja y cuatro loros Cabeza Amarilla.

Todos los ejemplares forman parte de especies bajo la categoría de riesgo de “Peligro de Extinción” de acuerdo a la NOM-059-SEMARNAT-2010, así como reguladas por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES).

Los ejemplares habian sido abandonados en tres cajas de cartón antes de cruzar el retén de control y vigilancia en la carretera Sonoyta-San Luis Río Colorado.

Fueron recuperados en un área cercana al kilómetro 176 más 500 de la carretera que tiene como destino más inmediato la ciudad fronteriza de Mexicali, y se encontraban en difíciles condiciones de salud debido a las altas temperaturas del lugar y la falta de alimento.

La especie de loros Nuca Amarilla, refirió la Profepa, se ubican en el estado de Chiapas; los loros Cabeza Amarilla se distribuyen en la costa del Pacífico desde el estado de Oaxaca hasta Jalisco y en las costas del Golfo de México, con excepción de la Península de Yucatán; los pericos Frente Naranja se sitúan por toda la vertiente del Pacífico desde el  estado de Sinaloa hasta Chiapas.

La Profepa aseguró a los 50 psitácidos y los trasladó a la instalacion de manejo de vida silvestre “Contacto Salvaje”, ubicada en la ciudad de Ensenada, Baja California, en donde serán nuevamente valorados por personal experto y sometidos al proceso de cría, manutención y rehabilitación.

La Procuraduría destacó que la venta, captura, posesión, transporte o acopio ilegal de este tipo de especies de psitácidos (pericos o loros de distribución nacional) podría configurar un delito federal que puede ser sancionado con uno a nueve años de prisión y de 300 a tres mil unidades de medida como multa, de acuerdo al artículo 420 del Código Penal Federal.

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