Cultura

Publican en español el diario de viaje de la escritora Mary W. Shelley

En este diario, Mary Shelley (Londres, 1797-1851) vislumbra el estallido de la guerra transeuropea de 1948 y apunta que las viejas potencias que utilizan métodos conservadores autocráticos para suprimir los deseos del pueblo, lo están haciendo a expensas suyas, dice Alejandro González Ormerod.

En este diario, Mary Shelley (Londres, 1797-1851) vislumbra el estallido de la guerra transeuropea de 1948 y apunta que las viejas potencias que utilizan métodos conservadores autocráticos para suprimir los deseos del pueblo, lo están haciendo a expensas suyas, dice Alejandro González Ormerod.

Publican en español el diario de viaje de la escritora Mary W. Shelley

Publican en español el diario de viaje de la escritora Mary W. Shelley

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

Andanzas por Alemania e Italia. 1842 – 1843, de Mary Wollstonecraft Shelley, es un diario de viaje donde la autora disfraza sus ideales políticos a través de su prosa. “Shelley realizó propaganda política a favor de la unificación italiana, pero de una forma personal, a través de sus vivencias”, señaló en entrevista con Crónica el traductor Alejandro González Ormerod.

En este diario, añadió, Mary Shelley (Londres, 1797-1851) vislumbra el estallido de la guerra transeuropea de 1948 y apunta que las viejas potencias que utilizan métodos conservadores autocráticos para suprimir los deseos del pueblo, lo están haciendo a expensas suyas.

“Cinco años antes de que estallara la revolución transeuropea, Mary W. Shelley describió la decadencia de las viejas potencias europeas, quienes suprimían los deseos del pueblo, con métodos conservadores autocráticos, a expensas propias. Al final de cuentas, es un diario antes del estallido más grande de Europa hasta ese momento”.

La decadencia está presente en las descripciones de sus viajes a Fráncfort, Kissingen, Insnsbruck, Venecia, Florencia, la Toscana, los Estados Pontificios y Roma, entre otros, donde relata desde el arte, las costumbres y vivencias de sus habitantes. “Te introduce en un contexto muy particular de fronteras que ya no existen”.

“Marry W. Shelley está siendo auténtica, no quiere reproducir cifras, te lo confiesa: no te voy a dar datos precisos ni una enciclopedia de cómo es Venecia ni la situación política, sino mi análisis de la gente auténtica de Italia”.

Respecto a Alemania, agregó, tiene una visión muy pragmática. “Ella va a Alemania a curarse los dolores de la edad, que después nos damos cuenta que son poco más que eso, pero es horrible, siniestro, tierno y triste leerlo. Ella no sabe que tiene ese tumor cerebral, pero lo siente”.

Conforme va cruzando gradualmente las fronteras, Mary Shelley se va adentrando como los riachuelos, desde la cima de las montañas, hacia las faldas. “Van creciendo los ríos tanto como su emoción y su pasión por la historia del espacio”.

“Ella es un eterno peregrinaje y, además, lo que quiere hacer es llegar a Italia para hacer un recorrido de su propia vida y explorar ese dolor que le causó la muerte de toda su familia en Italia, para ella Italia es la tierra del futuro y la del sufrimiento, ella a su vez es una metáfora andante de ello”.

Una cosa que es importante de Shelley, explicó, es el nivel emocional que impregnó en sus andanzas, ya que permiten sea una experiencia empática a través de sus pensamientos más profundos y sus experiencias dolorosísimas.

“Ella te está explicando, sin victimizarse, pero sin perdonar, la experiencia de una forma rara porque lo hace tanto subjetivamente como objetivamente. Es un ejercicio de empatía que ella reconoce como la definición del viaje, que lejos de ser un palomeo de monumentos, es una exploración empática del mundo a tu alrededor”.

CERCANÍA. A pesar de la lejanía geográfica, temporal y política que mantenemos actualmente con Mary W. Shelley, nuestra realidad aún comparte inconformidades sociopolíticas con la autora, desde el feminismo hasta la libertad sistémica que ejercemos.

“Uno se pone a pensar sobre el privilegio que tenía y tiene una mujer para viajar sola, que era y es mal visto, además de peligroso, aunque ella no lo mencione. Son mundos y movimientos completamente distantes y ajenos, pero sigue siendo la misma lucha”.

Por otro lado, cuando Mary Shelley está en la Venecia ocupada por el Imperio Austriaco después de las guerras napoleónicas, se siente triste y muy afortunada de ser quien es por tener ciertas libertades intelectuales, ya que se da cuenta de que si los italianos, como sociedad, hicieran cualquier otra cosa medianamente más intelectual, en lugar de estar inmersos en la lujuria y la ridiculez, los destruiría el estado.

“Mary Shelly apunta que la libertad es sistémica porque si quisiera un hombre o una mujer veneciana que tiene los medios, educarse de manera liberal o revolucionaria, estaba autocondenándose al exilio o la prisión y a ser perseguido por policías secretas por mostrar el mínimo interés en un libro”.

SELECCIÓN. Las andanzas de Mary Shelley originalmente fueron contenidas en tres tomos, no obstante Minerva Editorial y Alejandro González Ormerod realizaron una selección de las cartas que conforman esta edición y que se publican por primera vez en español.

La selección procuró condensar las ideas y pasiones de Shelley, “íbamos a tomar en cuenta, más que nada, el aspecto romántico y emocional del texto, ya que mucho del texto se enfoca a nivel casi enciclopédico a platicarle las obras”.

“Al mismo tiempo, fue importante retener la mayor cantidad de información es el aspecto político ya que este manifiesto a final de cuentas; y respetar a las feministas de la segunda ola del siglo XX, ya que fueron ellas quienes nos ayudaron a redescubrir a Mary Shelley como autora fuera de Frankenstein”.